La gran cantidad de vuelos y turistas que por aire y por mar llegarán a partir del 1 de julio a Baleares preocupan a los profesionales encargados de su control sanitario a la llegada a suelo balear, y por este motivo advierten que cuando se abran las fronteras al turismo internacional «el refuerzo sanitario debe estar garantizado».
Este lunes IB3 ràdio ha entrevistado a Mar Faraco, presidenta de la Asociación Española de Sanidad Exterior (AMSE), quien ha dejado claro que los 150 médicos de sanidad exterior actuales son insuficientes para cubrir todos los puertos y aeropuertos de las Islas.
De hecho ya no están dando a basto ahora, y por ejemplo, en Ibiza las labores las realizan personal de la Policía Nacional y del Govern, puesto que sanidad exterior carece de cuerpo propio en las Pitiusas.
Faraco ha afirmado que los médicos de sanidad exterior intentan controlar la importación de casos, y ha llamado la atención de las peculiaridades de Baleares y Canarias, por la gran afluencia turística que reciben.
Sobre la opción de realizar pruebas de diagnóstico PCR a la llegada de los turistas a Baleares, la experta ha indicado que «la organización sería realmente compleja, muy compleja», asegurando que lo importante es que las personas que vengan procedan de «países con una situación epidemiológica similar a la nuestra. En cambio, en el caso de otros países muy concretos sí podría pedir una prueba en origen y en destino», ha precisado Faraco.
La representante de los médicos de sanidad exterior considera que hacer una prueba PCR a todos los turistas es «impracticable y tampoco es la panacea, no te asegura que el contagio no se haya producido o pueda producirse más adelante», por lo que lo importante es el control y una rápida respuesta en caso de producirse contagios.