El Govern pedirá esta tarde al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana que aumente las frecuencias de transporte aéreo entre las islas a partir de la próxima semana y que en el tráfico marítimo que hasta ahora solo transporta mercancías lleve también pasajeros, ha anunciado este lunes el conseller de Movilidad, Marc Pons.
«Mejorar de forma segura el aumento de transporte entre las islas» es el objetivo, ha dicho Pons, quien ha detallado que la voluntad del Govern es poder trabajar a lo largo de toda esta semana en esta cuestión para poder incrementar las frecuencias entre las islas, aunque sea el Gobierno central el que fije los criterios de esa movilidad, ha explicado en una rueda de prensa telemática.
El conseller ha detallado que la voluntad del Govern es «que se recuperen de manera paralela las frecuencias» entre las islas y que el incremento sea en la conexión aérea de Mallorca con Menorca y con Ibiza, ha dicho tras la reunión con responsables del transporte aéreo y marítimo en Baleares previa a un encuentro telemático de todas las comunidades esta tarde con el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos.
Ha indicado que el número de frecuencias dependerá de la demanda y de la evolución de las fases de desescalada en las distintas islas.
En cuanto a la forma de llevar a cabo ese aumento de transporte, Pons ha recalcado que la prioridad sería la seguridad y se estudia que se apliquen «criterios similares» a los aplicados este lunes en Formentera, que ha entrado en fase 1. A los pasajeros entre Ibiza y Formentera, se les realiza un control de medición de la temperatura y un cuestionario de salud, entregado a las autoridades sanitarias, además de un test de anticuerpos.
El aumento de pasajeros «supone una mayor vigilancia» y también la realización de test de anticuerpos a todos los viajeros que van a Formentera. «La voluntad es que el control de temperatura, cuando el resto de las islas entren en fase 1, sea una exigencia que se marque también».
En cuanto al transporte con la Península, Pons ha dicho que lo decidirá el Gobierno y no será viable hasta que no se permita la movilidad entre comunidades autónomas. Ha añadido que se tienen que fijar además criterios europeos para marcar la seguridad en el transporte.
Pons ha avanzado que el Govern pedirá también inversiones al Gobierno. Ha explicado que una vez se supere la crisis sanitaria, la voluntad del Govern es «reforzar los trayectos a pie y en bicicleta en las zonas urbanas» y «evitar muchos desplazamientos de vehículos».
El conseller ha recalcado que ese esfuerzo, que se abordará «siempre con acuerdo municipal», supondrá la aplicación de políticas de refuerzo de la movilidad no motorizada, para las que «no solo hará falta normativa, también inevitablemente inversiones y desarrollar un plan».
«Estaría bien que el Ministerio de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana pudiera impulsar planteamientos a los que se pudieran acoger las comunidades autónomas para coordinarlos con los ayuntamientos», ha dicho al respecto de esas inversiones.