La consellera de Salut, Patricia Gómez, no cesará al portavoz del comité de enfermedades infecciosas de Baleares, Javier Arranz. Por tanto, rechaza la petición realizada por el Sindicato Medico de Baleares (Simebal) y Arranz seguirá dando cada día la información sobre el nuevo brote de coronavirus.
Gómez ha argumentado que Arranz «no tiene ningún cargo político, ni sobresueldo por el esfuerzo que hace»; es médico de familia. Además, ha destacado que es un profesional de prestigio a nivel nacional y ha puesto de manifiesto «su capacidad de comunicación».
Simebal ha pedido la dimisión de Arranz porque el pasado 15 de abril le solicitaron formalmente a Arranz que se retractase de sus palabras en la rueda de prensa del día anterior, cuando el sindicato interpretó que culpaba a los profesionales sanitarios de contagiarse de COVID-19 por el uso inadecuado y la exposición a las fuentes de contagio fuera del ámbito sanitario..
Entre otros asuntos, también le recrimina que disfrutara de vacaciones del 6 al 26 de marzo, cuando «el IB-Salut las suspendía a todo el personal sanitario», así como que en esas fechas «se debían adoptar las medidas que debían evitar el avance de la pandemia».