El gremio de peluqueros denuncia la competencia desleal de las barberías, a causa de una fórmula de negocio que está proliferando en los últimos tiempos. Se trata de las barberías low cost. Según algunos profesionales, la mecánica de estos negocios es que el dueño de la barbería, que en muchas ocasiones ni siquiera se dedica al oficio, alquila los tocadores a barberos que han de pagarse la seguridad social, así como los productos. Además, un porcentaje de cada servicio, que oscila entre el 40 y el 50, va a parar al salón.
Joan Coll, presidente del Gremi de Perruquers i Perruqueres, explica que «alquilar un tocador viene de América, allí es muy habitual, pero aquí es ilegal». El problema principal que causan tiene que ver con la diferencia de precios ya que «son peluquerias que no pagan los impuestos que tienen que pagar y bajan los precios». Coll comenta que «después de la crisis la clientela no se recuperó, creo que la gente va a lugares como estos, que son más económicos.
El presidente matiza que «el servicio de las barberías es distinto: nosotros ofrecemos un buen local, un servicio personalizado, cortamos con tijera, mientras en estas barberías normalmente todo va con máquina... El nivel de nuestra peluquería es medio alto, y los clientes no buscan rebajas. Algunos incluso han ido y no les gusta por falta de atención».
Servicio
Por su parte Rafael Rubio, vicepresidente del Gremi, explica que «en peluquerías como la nuestra, tardamos entre 30 y 35 minutos en cortes de caballero, pero en las barberías low cost se tardan 10. Tanto la calidad del servicio como el trato al cliente va a la baja porque tienen que cubrir el tiempo. Si no tienen trabajo puede que se recreen, pero en horas puntas tardan entre 8 y 10 minutos por cliente. Si cuentas el tiempo y el efecto del trabajo y son bastante más baratos».
El gremio de peluqueros pide «que se normalice la situación, que paguen a la Seguridad Social , y que hagan sus horas correspondientes. Pedimos que dejen de tener asegurados a los trabajadores a media jornada si trabajan jornada completa. Si se puede tener autónomos, que los tengamos todos, y si es por contrato, que todos contratemos. No queremos distinciones», subrayan.