Desde la presentación del proyecto del centro comercial Palma Springs en ses Fontanelles, en octubre de 2014, han pasado cinco años de litigios entre la promotora Unibail Rodamco (URW) y las administraciones, principalmente con el Govern y Ajuntament de Palma. La decisión firme de la promotora inmobiliaria francesa de acometer este proyecto, que califica de emblemático para la multinacional por su configuración, diseño y ubicación, es lo que ha propiciado esta semana su reclamación de 45 millones al Govern en concepto de perjuicios ocasionados por la demora en la implantación y construcción de Palma Springs.
Ante el anuncio de esta reclamación, por responsabilidad patrimonial, el vicepresidente y conseller de Transició Energètica i Sectors Productius, Juan Pedro Yllanes, puntualizó que el Govern dará la licencia autónomica comercial, pero que ello no implica su construcción.
«La licencia comercial se la tenemos que dar porque así nos obliga por sentencia el TSJB. Vamos a cumplir la legalidad de forma rigurosa, pese a que este centro comercial no está en la estrategia del Govern. Apostamos por el pequeño y mediano comercio, es decir, el de proximidad. Al final habrá que tomar una decisión política: seguir o no seguir adelante o pagar la indemnización que corresponda».
La reacción del Ejecutivo autonómico viene motivada porque URW cifra en 217 millones de euros el lucro cesante en caso de que Palma Springs no llegue a construirse.
El director de Desarrollo, Construcción e Inversión de Unibail Rodamco Spain, Lorenzo Castilla, dejó claro esta semana, ante la postura del Govern, que «queremos desarrollar el proyecto y estamos dispuestos a negociar con el Ajuntament de Palma para analizarlo y adaptarlo a lo que considere».
Castilla demostró con ello el talante de la promotora para culminar esta iniciativa empresarial en Mallorca que, según URW, «es buena para Palma y para la regeneración de la Playa de Palma». Añadió que esperan llegar a algún tipo de acuerdo con el Ajuntament. «Si nos dan la licencia de obras en el primer semestre de 2020, el centro comercial estará en funcionamiento en el primer semestre de 2022. En su día nos comprometimos a tener acabada su construcción en un plazo de dos años».
Proyecto
A falta de una decisión política, la empresa promotora insiste en los beneficios económicos y laborales del proyecto. El interés que suscitó hace cinco años su presentación y todo el proceso de comercialización que realizó URW, posibilitó que la promotora cerrara varios acuerdos con firmas de prestigio internacional.
Así, entre las empresas que confirmaron su presencia en Palma Springs se encontraban el grupo Inditex, que selló un acuerdo con Unibail Rodamco para traer sus principales marcas, como Zara, Massimo Dutti o Bershka. A estas firmas se sumaron Mango y Violeta, un hipermercado de Alcampo, restaurantes de alta gama y doce salas de Cinesa.
El arquitecto del centro, Ignacio Vicens, afirmó en el acto de presentación en Cap Rocat, que «han sido la naturaleza de Mallorca y la obra pictórica y escultórica de Joan Miró las que han inspirado una arquitectura definida como singular, que convertirá a este centro en un referente europeo, un lugar que todo el mundo querrá visitar».
Protección medioambiental del humedal y del ‘limonium barceloi'
Las 18 hectáreas de zona verde que rodean el solar donde se ubicará el centro comercial, de unos 70.000 m2 de superficie, fueron cedidas por parte del promotor al Ajuntament de Palma. La empresa considera que «ha pasado de ser un vertedero insalubre a una zona húmeda protegida». La empresa ha realizado durante este tiempo las tareas de desescombro, ha mejorado el humedal, ha traslocado e incrementado la especie protegida limonium barceloi (ha pasado de 800 ejemplares a 40.000) y desde hace años monitoriza de forma continua los niveles de humedad y salinidad del mismo.
La presión de los grupos ecologistas sobre el humedal ha incentivado todas las medidas de protección por parte del grupo inmobiliario francés, que ha apostado por Mallorca para contar con un centro comercial de diseño mironiano con relevancia a nivel internacional. Unibail Rodamco lo quiere convertir en su buque insignia en Europa.
Eso del “lucro cesante” es según sus previsiones, pero el mundo –y ésta isla- están llenos de macroproyectos y urbanizaciones que luego tuvieron un “lucro reducidito”, muy por debajo de sus previsiones. Por lo que su base de petición de indemnizaciones es muy discutible. Más si encima las aerolíneas estan reduciendo vuelos en un 20 %. Pero si al final resulta que, jueces por en medio, tan “inevitable” es conceder la licencia, pongámoslo con más sensatez: no dar la licencia sin que la promotora pague las obras de acceso de una autopista de tres carriles para entrar y salir de ese macrobodrio de más consumo inútil, además de un cuarto carril en la autopista (y los puentes de acceso) hacia el aeropuerto, por la mucha saturación de tráfico que generará un centro que no hace ninguna falta al estar la isla ya muy bien provista de ellos.