La Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb), más conocido como el ‘banco malo' ha anunciado la puesta en marcha de Árqura Homes para la gestión y promoción de una parte de su cartera de proyectos residenciales en Baleares. La compañía tiene previsto invertir hasta el año 2027 un total de 104,2 millones de euros en la promoción de 628 viviendas repartidas en Mallorca ( 527) y Menorca (101).
Desde el Sareb indican que el 41 % de este total de viviendas se corresponde con promociones en curso; el 29 %, con suelo en desarrollo y el 27 % en suelo finalista. La gestión de los activos correrá a cargo de Aelca, una de las promotoras de referencia del sector y que es propiedad de fondos gestionados por Värde Partners, una entidad de inversión global alternativa.
El proyecto más importante que acometerá el Sareb se realizará en varias parcelas de terreno de propiedad suya en la urbanización de Son Ferragut, donde tiene previsto construir 321 pisos.
El Ajuntament de Palma aprobó esta urbanización en 2002, pero la crisis económica motivó la paralización de las obras en 2007 y no volvieron a reanudarse hasta 2014. Durante este tiempo se han producido diversos cambios en la propiedad: pasó de Son Dameto Ibercor a Sa Nostra y de ésta al ‘banco malo'.
Fuentes del Sareb indicaron este jueves que la entrega de viviendas que se construyan se entregarán en el periodo comprendido entre 2021 y 2027 «dependiendo si se trata de suelo finalista o en desarrollo».
Aparte de Son Ferragut, hay contempladas levantar 88 viviendas más en un solar de la calle Mare de Deu de la Victoria, así como 188 en la calle del Torrent, en Calvià. La inversión total en la Isla será de 89,5 millones.
Por lo que concierne a Menorca, están previstas 101 viviendas en Ciutadella, en concreto en Son Oleo. La inversión es de 14,7 millones y la entrega de las viviendas se producirá en 2027.
Desde Aelca y el Sareb coinciden en señalar que todas estas promociones tendrán salida por la falta de oferta en estos momentos en el mercado balear.
«El precio final de venta de los pisos se situará entre los 200.000 y 220.000 euros. El objetivo es ofrecer viviendas a precios razonables para ampliar el actual abanico que impera en las Islas, donde la revalorización de la vivienda sigue incrementándose por la demanda de los mercados extranjeros», puntualizan desde el Sareb.
Estas actuaciones, según los promotores inmobiliarios de las Islas, «tendrá una incidencia positiva, pero se necesita incrementarla para dar respuesta a una demanda creciente entre la población residente de Mallorca y resto de islas».