Las carreteras de Mallorca ya están al límite. La consellera de Territori del Consell de Mallorca y responsable de las obras viarias de la Isla, Mercedes Garrido, alertó este lunes de que la situación es tan delicada que cualquier incidente mínimo provoca un colapso general, y eso que aún faltan más de dos meses para que llegue la temporada alta.
El incidente de este lunes se produjo en la autopista entre Palma y Andratx como consecuencia de unas obras de mantenimiento de la mediana. El corte de uno de los carriles para que los operarios pudieran trabajar con seguridad originó un atasco kilométrico durante buena parte de la mañana.
El incidente del viernes no guarda relación con las obras, sino que fue un accidente leve en esta misma vía pero en dirección a Andratx. También las colas de coches ocuparon varios kilómetros y los efectos fueron similares a los que provocaron las obras de mantenimiento.
Un mes de adelanto
Mercedes Garrido aseguró que el aumento de tráfico es tan evidente que los atascos que el año pasado comenzaban en el mes de mayo se han adelantado un mes y ya se producen en abril. Afirmó que, por ahora, no dispone de datos que certifiquen este aumento de tráfico, pero se mostró convencido de que cuando tenga las cifras se verá seguro el aumento.
La consellera de Territori explicó que las obras de la vía conectora ayudarán a descongestionar en parte el tráfico en los accesos a Palma y en la vía de cintura, ya que no será necesario entrar en la capital para acceder a según qué zonas de la Isla.
Sin embargo, opinó que la clave para reducir los atascos y embotellamientos está en fomentar el uso del transporte público entre los ciudadanos. Desde este punto de vista, la creación de una serie de aparcamientos disuasorios en las cercanías de Palma podría ser una apuesta por el fomento del transporte público, pero también animaría a que la gente coja su coche y lo lleve hasta esos aparcamientos disuasorios en lugar de viajar al trabajo en transporte público.