El cementerio de Palma (Son Valentí) tiene un serio problema de pérdidas en la red interior de agua que se pone a disposición de los usuarios.
Las fugas se dan en el trazado original de una parte del recinto, en el sector IV, y están cuantificadas en casi 3.000 litros de agua por hora. La empresa municipal ha tenido que tomar medidas provisionales, inutilizando este viejo trazado, a la espera de poder ejecutar un proyecto de renovación de toda la red de canalización de esta zona.
El proyecto de renovación de la red que se pretende acometer supondrá una inversión de 180.000 euros que deberán salir del presupuesto de la empresa municipal la cual, recuerda el gerente de la EFM, Jordi Vila, mantiene una cuenta de resultados positiva.
Este hecho «permite ir amortizando la deuda histórica acumulada de la empresa que actualmente aún es de 10 millones de euros y que se espera tener amortizada en el año 2023», afirma el gerente. Vila reconoce que esta deuda «es un lastre» sin el cual la «empresa podría dar mucho más de sí».