El PP pierde terreno en Palma. De los 76 barrios que ganó en las elecciones generales de 2011 (de un total de 78), el pasado domingo venció sólo en 49, mientras que en otras 24 zonas la primera fuerza ha sido Podemos, que controla así un tercio de las barriadas.
El PSOE apenas levanta cabeza, pues aunque conserva los dos barrios que controló hace cuatro años, Son Roca (36,38 %) y Son Ximelis (38,58 %), sólo ha sumado tres más, Mare de Déu de Lluc (25,41%), Son Gotleu (33,54 %) y Estadi Balear (27,53 %). Ciudadanos, Més y Unidad Popular no se imponen en ningún barrio.
Los ‘populares‘ han perdido feudos y también peso en los que aún conservan, por la fragmentación del voto que se ha ido mayoritariamente a Podemos. El partido sigue conservando la supremacía en los barrios del centro tradicionalmente de clase alta –en Jaume III una de cada dos personas votó al PP, lo que le convierte a el barrio más conservador–, pero ha perdido barriadas gentrificadas (zonas céntricas y populares en que la población original ha ido siendo desplazada por otra más joven y de un nivel adquisitivo mayor) como Cort, Sindicat, la Missió o el Jonquet, que se han decantado por Podemos.
El PP también ha perdido, en favor del partido de Pablo Iglesias, barrios de clase media, como el Molinar, Arxiduc, Plaça de Toros, Son Oliva, Son Peretó, Son Espanyolet o el Terreno; y otros más obreros o periféricos, como Rafal, el Vivero, el Secar de la Real o Son Fortesa. El mejor resultado de Podemos se ha logrado en Sindicat (un 34,26 %) y el del PSOE ha sido en Son Ximelis (un 38,50 %).