Los cuatro encausados por las protestas registradas en Bunyola el 28 de mayo de 2012 al paso de un convoy con el entonces presidente, José Ramón Bauzá, han sido condenados a una multa de 6 euros diarios durante 9 meses por un delito de desobediencia grave.
La titular del juzgado de lo Penal número 1 de Palma ha dictado este martes la sentencia sobre el juicio que se celebró el pasado 15 de septiembre. En ella absuelve a uno de los acusados de la falta de lesiones, después de que el Ministerio Fiscal modificara sus conclusiones provisionales durante el juicio y retirara en ese sentido su acusación.
Según el fallo, la juez considera probado que los acusados llevaron la iniciativa de la protesta contra la visita del ex presidente del Govern. En el relato de hechos probados la juez constata que participaron de forma notoria y activa desde que el convoy de la Guardia Civil que acompañaba al entonces presidente fue retenido en la Plaza de la Iglesia de Bunyola hasta llegar a la estación de tren, donde se produjo una sentada cortando la vía pública.
Esta resolución no es firme, se puede recurrir presentando un recurso de apelación ante la Audiencia Provincial.