Fuentes del Obispado de Mallorca confirmaron este domingo que el obispo Xavier Salinas dará instrucciones este lunes a Càritas para que organice el alojamiento de familias refugiadas de Siria en las distintas parroquias de la Isla, tal y como sugirió el papa Francisco en su alocución dominical en la plaza de San Pedro de Roma.
El objetivo del Santo Padre es que cada una de las parroquias europeas se haga cargo de una familia de refugiados.
Una de las primeras tareas que tendrán que acometer los responsables de la Diócesis mallorquina es evaluar los inmuebles diponibles, así como su capacidad.
Esta tarea, que al final podría enmarcarse en una operación de ámbito estatal coordinada por la Conferencia Episcopal Española, estará pilotada desde Càritas, en concreto por su directora, Margalida Riutort. Esta organización no gubernamental, vinculada a la Iglesia católica, está especializada en la asistencia social a los más necesitados.
De momento se desconoce el número de familias sirias de las que se harán cargo las parroquias de Mallorca, cifra que estará pendiente de la autorización del Gobierno.
No hay más ciego que el que no quiere ver. Cuando salen de Siria son refugiados, pero cuando salen de Turquía son inmigrantes económicos que van a parasitar los sistemas sociales de los países del norte de Europa. Tienen la lección bien aprendida y los europeos somos tontos dejándoles entrar. Turquía no está en guerra y su vida no corre peligro allí. Sin duda hay que tratarles como seres humanos, pero así como llegan a territorio de la UE, hay que dirigirles a campos de refugiados provisionales, en los que sus necesidades básicas estén cubiertas (comida, techo, cama y condiciciones sanitarias), pero tan pronto el conflicto de su país haya terminado, hay que devolverles a sus países de origen, que es su obligación moral y allí están los suyos. Su cultura, costumbres, valores, religión, idioma y climatología son diferentes a las que tenemos en Europa, no tienen nada en común con nosotros y no se van a adaptar a nuestro modo de vida, van a formar guetos que a la larga sólo van a ser un foco de problemas. Cuando Europa se dé cuenta de lo que ha hecho, será demasiado tarde.