El nuevo servicio de «fast lane» (carril rápido) entra este martes en funcionamiento en el aeropuerto de Son Sant Joan en medio de la polémica.
A lo largo de la mañana de este martes, primer día de puesta en marcha de la medida, la desinformación era la tónica generalizada entre los usuarios.
AENA cobrará a las aerolíneas que opten por utilizar el «fast lane» 1,5 euros por pasajero, quedando en manos de las compañías cobrar lo que quieran a los pasajeros que deseen pasar por el carril rápido para acceder sin hacer las tradicionales colas en zig-zag hacia los filtros de seguridad.
Este lunes Air Berlin, Iberia Express, Air Europa, Vueling y Air Nostrum, no sabían exactamente qué cantidad podrían cobrar a los pasajeros que no sean «priority» (primera clase y tarjetas de fidelización preferentes).
Coinciden en que «en función de la tarifa que abone el pasajero se dará o no de forma gratuita el pase para ir al carril rápido. Los priority y los de primera clase podrán hacerlo gratis, ya que el coste lo asume la aerolínea».
Ninguna compañía pudo puntualizar cuánto se cobrará a un pasajero turista que, por las razones que sean, quiera pasar por el carril rápido porque llega tarde a la puerta de embarque o por cualquier otra urgencia.
El problema radica en la cuantía que tendrá que abonar el pasajero de turista por este servicio, que no será inferior a 1,5 euros.
MÉS hará una pregunta parlamentaria para conocer la opinión del Govern, afirmando que mientras se posiciona contra la ecotasa no dice nada sobre el cobro de este servicio.