Preocupación y malestar entre médicos, enfermeras y personal administrativo del SUAP (Servicio de Urgencias de Atención Primaria) que trabajan en los tres Puntos de Atención Continuada (PAC) de Palma porque la Gerència de Mallorca ha optado por prescindir, a partir del 1 de noviembre, del personal de refuerzo.
Estos técnicos llevan más de un año y medio trabajando tarde y noche junto a ellos para atender a los pacientes de urgencias.
La medida, que ha sido confirmada por la Gerència d'Atenció Primària, se ha tomado, según el Govern, por la menor demanda asistencial existente en las urgencias de s'Escorxador, Escola Graduada y Son Pisà.
Sin embargo, los trabajadores afirman que se trata de una medida más de recorte por la falta de presupuesto del IB-Salut.
El personal de refuerzo que el próximo 31 de octubre terminará su trabajo está formado por unas 12 personas -médicos, enfermeros, celadores y conductores- y fue contratado cuando el Govern acordó comprimir los horarios de los centros de salud y cerrarlos por la tarde a las 17.30 horas, optando por reforzar los SUAP.