El yate Fortuna, una vez concluido su uso privado por parte de la Familia Real, sería una embarcación muy apropiada e interesante para el chárter de alto standing, por su glamour y prestaciones. Así lo afirman algunas firmas especializadas en el alquiler de superyates. Su precio oscilaría entre los 70.000 y los 90.000 euros por semana.
Se trata de un mercado en expansión en el Mediterráneo, cuyos usuarios son principalmente británicos y rusos de alto poder adquisitivo. En Mallorca está cobrando especial relevancia como puerto de visita o como centro de contratación en el Mediterráneo, con oficinas establecidas en Puerto Portals, principalmente. Firmas con amplia experiencia y prestigio internacional ofrecen embarcaciones mayores, aunque el Fortuna, coinciden en señalar todas, es único en su género.
Según ha indicado a Ultima Hora Johnatan Syrett, de Camper & Nicholsons, «sería un yate excepcional y novedoso en este mercado. En España no hay barcos así para chárter, con el aliciente además de su historial y su enorme velocidad». Para Luis Coll, de Internautic Yachts, «se trata de una embarcación muy interesante para el chárter de alto nivel, centrado en lugares como la Costa Azul, Córcega o Cerdeña, por el caché que tiene». Al respecto, se incide en que no es un tema fácil por su elevado coste operativo. Así mismo gestionar su uso desde Mallorca no parece viable, dado el gasto de matriculación e impuestos existentes en España, requisitos que no existen en otros países vecinos como Francia o Italia.A tal efecto, Marina Estrella indica que el Estado podría rentabilizar la propiedad del yate operando el chárter a través de una empresa internacional. Una particularidad de la embarcación es su elevado coste de mantenimiento cifrado en torno al 1,6 millones de euros al año y su elevado consumo, debido a un peculiar equipo propulsor. Mientras la mayoría de yates de este porte (en torno a los 40 metros de eslora) navegan a 20 nudos, el Fortuna puede superar los 65 nudos, gracias a tres turbinas de gas Rolls Royce comparables a las de un navío de guerra.