Los grupos de la oposición han presentado un recurso de reposición ante el Consell de Mallorca para que la institución se pronuncie sobre la legalidad del acuerdo del pleno del pasado 10 de diciembre en el que se anunció la «llegada inminente» de residuos foráneos para su incineración en la isla.
El portavoz socialista en el Consell de Mallorca, Jaume Garau, ha asegurado hoy en una rueda de prensa que la empresa concesionaria de la incineradora de Son Reus, Tirme, no tiene derecho a quemar residuos importados mientras no se modifique el contrato, por lo que cualquier acción en este sentido es ilegal.
El pasado viernes llegó a la isla el primer barco con combustible sólido recuperado (CSR), procedente de una instalación de Sabadell, para su aprovechamiento e incineración y valorización energética en Son Reus.
«No sabemos si el Consell ha firmado un papel con Tirme para autorizarla la quemar los residuos, lo que sería ilegal», ha insistido Garau, que ha señalado que si bien conoce de la llegada de los residuos de Sabadell no sabe los detalles de este arribo ni cómo se gestionará la incineración.
Por su parte, el portavoz de la coalición PSM-IV-ExM en el Consell de Mallorca, Joan Font, ha calificado de «oscurantismo total» el manejo de este tema por parte del equipo de gobierno de la institución insular porque «oculta información a la ciudadanía» cuando debería ser un proceso totalmente «transparente».
Font ha criticado la gestión de la consellera insular de Medio Ambiente, Catalina Soler, que justificó la importación de residuos de fuera de Mallorca a cambio de congelar la tasa de incineración mientras que Tirme ha dejado entrever la posibilidad de que esta deberá ser incrementada.