La lluvia volvió a caer ayer con fuerza en Mallorca tras cinco meses sin hacer acto de presencia de forma significativa; lo que cayó hace un mes fue barro como consecuencia del aire africano. Tal y como había previsto la delegación territorial de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) en Balears, durante la tarde de ayer hubo tormentas en la Isla, que descargaron con fuerza provocando inundaciones como en la zona de sa Llonja y Sagrera. Así, el aeropuerto de Palma activó el plan de alertas por tormentas, lo que motiva una regulación en los vuelos de llegada que pasan de 33 aterrizajes a 27.
El portavoz de la Aemet en Balears, Miguel Gili, avanzó que para hoy se espera que continúe al inestabilidad. No obstante, la alerta amarilla por tormentas se desactivará por la mañana; a lo largo del día se esperan precipitaciones menos intensas. Durante el fin de semana continuará la inestabilidad meteorológica, especialmente el sábado cuando podrían intensificarse las lluvias.