No existe la más mínima duda, y los testimonios de acumulan, de la dura represión ejercida en Mallorca por el conde Rossi y los sicarios de Mussolini en los primeros meses de la Guerra Civil. Lo que quizá pude suponer cierta novedad para alguien es que la ‘ocupación' italiana en 1936 no fue más que colofón de una estrategia diseñada por el fascismo italiano para la ‘conquista' de Balears desde años atrás y que tuvo una avanzadilla pacífico en el turismo, concretamente en la llegada de cruceros en los años veinte del pasado siglo.
Así se pone de manifiesto en un libro que acaba de reeditar el grupo de estudios libertarios Els Oblidats y que se presenta el próximo día 30: Mussolini a la conquista de las Islas Baleares (Edicions El Moixet Demagog, Palma, 2012). Su autor es Camillo Berneri (1897-1937) un anarquista que dejó escrito el libro poco antes de su asesinato partiendo de documentos hallados en el consulado italiano en Barcelona una vez que la rebelión fascista fue derrotada.
La obra, deja claro que Balears siempre fue vista como ‘el caballo de Troya para su aventura imperialista en el Mediterráneo.
«Las agencias consulares italianas en Baleares no eran más que avanzadas en la penetración imperialista del gobierno e Mussolini», dice el autor quien anota como, con descripciones sobre «el cielo azul» y el «oasis lujuriante» de Mallorca, se organizaron cruceros que siempre hacían escala en la Isla y sentaban las bases para la aventura que protagonizó el sanguinario Conde Rossi, al que apoda ‘dictador de Mallorca'.