El Consell de Mallorca y la Asamblea de Alcaldes rindieron ayer un emotivo homenaje a los primeros alcaldes de la democracia. «Hoy (por ayer) hacemos algo más que rendir un merecido homenaje a los hombres y mujeres que en el año 79 asumieron la responsabilidad de ponerse al frente de los ayuntamientos. Rendimos un homenaje a la democracia», manifestó la presidenta de la Institución insular, Francina Armengol. En este sentido añadió que en estos 30 años «los ayuntamientos han sido una pieza clave en la consolidación de la democracia». La presidenta del Consell también recordó a personalidades como Emili Darder, Alexandre Jaume, Antoni Mateu, Llorenç Bisbal y Gabriel Alomar «unos políticos que por defender sus ideas pagaron un precio demasiado alto», sentenció. Por su parte, el conseller insular de Cooperació Local, Miquel Rosselló, aprovechó el acto para reivindicar más financiación para los ayuntamientos, así como que la nueva Ley estatal de Régimen Local defina claramente las competencias de los ayuntamientos. Rosselló destacó que los ediles asumieron «un reto impresionante» y aseguró que «los cambios producidos en estos 30 años son espectaculares».
Cuando se cumplían 30 años y un día de la constitución de los primeros ayuntamientos democráticos desde la República, todos los alcaldes elegidos en el 79 que siguen con vida y en buen estado de salud se reencontraron en el Teatro Principal de Palma, donde les entregaron una medalla y un pergamino grabado con la primera composición de cada consistorio. Armengol, Rosselló y los vicepresidentes de la Asamblea de Alcaldes de Mallorca, Guillem Ginard y José Ramón Bauzá, fueron los encargados de entregar el distintivo a los primeros alcaldes de la democracia, que recibían así un más que merecido homenaje.
El que fuera elegido alcalde de Artà el 3 de abril de 1979, Jaume Morey, agradeció el homenaje en nombre de todos los primeros ediles de la primera legislatura de la democracia. Además, señaló que la incorporación de las mujeres y los jóvenes a la política y la presencia de la lengua catalana en ámbitos en los que durante la dictadura estaba prohibida eran indicadores claros de la llegada de la democracia.
Uno de los momentos más emotivos del acto tuvo lugar durante la emisión de un vídeo, en el que tras la imagen del entonces presidente del Gobierno, Arias Navarro, anunciando «españoles, Franco ha muerto», comenzaron a verse imágenes representativas de la democracia (gente votando, Felipe González, etc.), acompañadas de música 'rock and roll'. El audiovisual, en el que también se explicó la constitución de los consells insulares y su importancia para los ciudadanos, realizaba un recorrido en coche por varios municipios de la Isla en los que los primeros alcaldes democráticos recordaban aquella etapa.