El Servei Balear de Salut (IB-Salut) cuenta, desde ayer, con una nueva promocion de residentes sanitarios integrada por un total de 110 personas entre médicos, farmacéuticos, enfermeras, biólogos y químicos. Así lo explicó ayer el director general de Avaluació i Acreditació de la Conselleria de Salut, Jaume Orfila, en el acto de bienvenida de la nueva promoción de residentes que se llevó a cabo en Son Dureta; en el acto también participó el gerente del hospital, Carles Ricci, y el director médico, Javier Martín. Las plazas de formación para internos residentes en Balears se dividen en 63 médicos especialistas, 30 de atención primaria, así como otras 12 de enfermería y 5 de la unidad de medicina del trabajo.
Orfila destacó que la llegada de los residentes contribuirá a paliar el importante déficit de especialistas que padece la sanidad balear, aunque remarcó que, «aunque se formen en Balears, no significa que se vayan a quedar destinados en las Islas de forma definitiva». Son Dureta, con un total de 49 profesionales médicos, será el hospital que contará con un mayor número de residentes. Son Llàtzer contará con 11, y el hospital de Manacor contará, por primera vez, con la formación de atención especializada en el área de ginecología.Por otra parte Orfila explicó que todos estos internos han debido superar una oposición nacional y señaló que el hecho de que personas de todo el Estado español hayan elegido hacer su residencia en Balears da una idea de que se garantiza la «calidad de la formación», apostilló.