El Instituto Balear de la Vivienda invertirá 22.000 millones de pesetas hasta el año 2004 en la construcción de viviendas, según anunciaron ayer en una rueda de prensa el president del Govern, Francesc Antich, y el conseller d'Obres Públiques, Francesc Quetglas. Ambos dirigentes comparecieron ayer para anunciar que la semana que viene se abre el lazo para solicitar una de las 50 viviendas en régimen de alquiler destinada a la población de entre 28 y 35 años. El precio de los alquileres va de 19.500 a 42.500 pesetas mensuales.
Antich y Quetglas destacaron la excelente evolución del grado de cumplimiento del plan de vivienda, que ha pasado del 4'3 por ciento del año 1999 al 100 por cien del año pasado. Hasta este mes, el grado de cumplimiento del plan es del 70 por ciento y la previsión para 2001 es llegar al cien por cien. Quetglas explicó que ello significa que, en estos dos años, se han generado más de 25.000 millones de pesetas en créditos para viviendas. Por lo que respecta a las subvenciones concedidas por las diversas administraciones, entre el Govern y el Gobierno las ayudas directas para la adquisición de vivienda sumarán 2.800 millones de pesetas en estos dos años.
En cualquier caso, Quetglas y Antich explicaron que, para poner en marcha este ambicioso plan, es preciso conseguir suelo a un precio no especulativo con una política «agresiva» en materia de suelo, tal y como dijo el propio president del Govern. Para ello, el conseller anunció la puesta en marcha de una nueva figura, el gestor público del suelo, que se encargará de generar suelo público para ponerlo a disposición de los promotores públicos. El conseller explicó que también estudiarán extender esta generación de suelo para los promotores privados.