La comunidad musulmana en España, que este viernes ha celebrado su primera oración del viernes tras los atentados de París, ha pedido perdón a Europa por los actos «de unos individuos que no saben qué es el Islam», al mismo tiempo que ha agradecido a España que les deje vivir en paz y con seguridad.
Alrededor de 1.500 personas han acudido al Centro Cultural Islámico de Madrid (conocido como mezquita de la M-30), donde el imán Hussam Khoja ha pronunciado un sermón (Jutba) en el que ha condenado el asesinato de inocentes civiles.
Se trata de personas «injustas» que «derraman la sangre» y «representan la maldad», ha dicho el imán en referencia a los terroristas.
Khoja ha pedido además a los jóvenes fieles que tengan especial cuidado a la hora de contactar con desconocidos por internet.
En una rueda de prensa posterior al sermón, el director del Departamento Cultural del Centro Cultural islámico de Madrid, Sami el Mushtawi ha insistido en pedir «perdón» y hasta «mil perdones» a Francia, Europa y a todos los que han sufrido los atentados.
«Sabemos lo que es la muerte», ha recalcado El Mushtawi en relación a los ataques que también sufren los musulmanes en diversos países.
Y ha pedido que se hable de Daesh o de grupos terroristas sin nombrar el Islam porque quienes son terroristas son «unos pocos malos que no comprenden» esta religión.
Asimismo, ha agradecido a España -«este bendito país»- su «tolerancia, convivencia y amor» y que permita a los musulmanes «cumplir con sus ritos», así como en Europa, donde viven 20 millones de musulmanes.
En la mezquita más grande de España y una del centenar que existe en la Comunidad de Madrid, este director cultural ha definido el Islam como «amor, fraternidad» y ha recalcado que su traducción es «paz», el lema que precisamente debe tener todo musulmán.
Por otra parte, Sami El Mushtawi ha afirmado que el Centro Cultural Islámico de Madrid, siempre está a disposición de las autoridades, y cuando detecta cuando viene alguna persona «nueva» se interesan por saber quién es o a qué se dedica.
«Estamos al acecho», ha enfatizado.
Ha reconocido que no hay una «solución mágica» para acabar con los extremistas, aunque ha abogado por medidas diplomáticas o económicas que «cierren las llaves» de aquellos que mantienen a esa gente.
También ha recomendado que cada musulmán y cada persona sea «cauta en su vida», pero ha destacado la importancia de la «educación», especialmente de los jóvenes, entre los que en los últimos días este Centro ha organizado charlas sobre los últimos sucesos.
A preguntas de los periodistas, El Mushtawi ha comentado que Arabia Saudí, país que financió la construcción de la mezquita de la M-30 en 1992, ha acogido a unos 500.000 refugiados, aunque lo hace en el «anonimato» a diferencia de Europa.