Aventurar unos resultados electorales es muy complicado pero en el caso de Sant Llorenç todavía lo es más. Y es que los cambios de partido de los candidatos junto con las nuevas apuestas, que buscan recuperar el terreno perdido, o hacerse un hueco abren muchas incógnitas. Los próximos inquilinos municipales tendrán que recurrir a pactos. Y es que en Sant Llorenç el juego electoral es un puzzle con muchas piezas. Siete partidos optan a la Alcaldía. ¿Cómo se podrán encajar?. Estamos ante las primeras elecciones en mucho años sin el histórico alcalde carrioner de GISCa, Mateu Puigrós. Sus siglas han desaparecido pero ahí sigue, por detrás, cerrando la lista del renacido Unió Independent Carrionera, un proyecto joven que nace con mucha ilusión pero con un tremendo reto: poder formar gobierno tras la estela de Puigrós.
Otros cierran una etapa en Son Carrió y empiezan una nueva en la zona costera. La hasta ahora regidora de GISCa, Emilia Díaz-Asensio encabeza una nueva formación de la zona costera avalada por el PI. Colau Bordal, otro de los hombres de Puigrós se ha pasado también a este lado. Procedente del mismo GISca llega Antònia Bauzà que junto al hasta ahora líder del PI, Onofre Prohens, pretenden conseguir representación bajo las siglas de xBalears.
Los hay inamovibles como Més que vuelve a apostar por la experiencia de Dolors Sánchez o el PSOE que continúa confiando en Pep Jaume Umbert, actual alcalde. El PP, por su parte, ha dado un giro radical y la histórica Manuela Meseguer deja paso a una cara popular: el presidente del Club Esportiu Cardassar, Jaume Soler. Desde Unidas Podem presentan un candidato nuevo, Francisco Javier Seda con la ilusión de estar en el gobierno.