La conocimos como la inspectora Ángela Betanzos en el exitoso serial Servir y Proteger de La 1 de Televisión Español, un trampolín que llevó a la actriz Lara Martorell (Palma, 1987) a uno de los proyectos de ficción más importantes en la televisión española: Veneno, de Javier Calvo y Javier Ambrossi, donde se metía en la piel de Fanny, la archienemiga de Cristina Ortiz ‘La Veneno'. Hasta la mismísima Madonna se enganchó a esta serie. Después llegaron destacados papeles como en la ficción Sicília sense morts, y su primer papel protagónico en la gran pantalla, en el cortometraje Anecoica, y este 2024 promete ser uno de los más importantes de su carrera: «Nada ni nadie me va a parar», sentencia la intérprete en esta entrevista con Ultima Hora.
Así, Martorell figura en el reparto de dos destacados estrenos que tendrán lugar muy pronto. El 19 de enero, el próximo viernes, la mallorquina llega a las carteleras de todo el país con El Correo, un trepidante thriller protagonizada por Luis Tosar, María Pedraza y Arón Piper (Élite), y el 9 de febrero se colará en las casas de medio mundo con la segunda temporada de Machos Alfa, la comedia número uno del gigante del streaming: Netflix.
‘Femme fatale'
En El Correo, Lara Martorell encarna a una femme fatale que tiene relación, sobre todo, con el personaje que interpreta José Manuel Poga, popular por sus papeles en La casa de papel o la reciente El cuerpo en llamas. «Mi personaje se llama Sienna y aunque es una femme fatale, no es una al uso, es una mujer despampanante, es un tía muy lista, sin duda». El filme está dirigido por el cineasta Daniel Calparsoro, «un profesional como la copa de un pino, ha sido un disfrute trabajar con él y creo, y espero, que no sea la última vez que trabajemos juntos, seguro que no», cuenta la actriz. La cinta gira en torno a una organización internacional dedicada al blanqueo de dinero, transportando maletines rumbo a Bruselas y Ginebra.
Y de una femme fatale a una abogada «muy seria, aunque con un punto diferente que sorprenderá». Así es Marisa de la Vega, su personaje en la segunda temporada de Machos Alfa. La mallorquina aparece en una de las tramas principales de uno de los episodios, «y no puedo contar mucho más, ¡que Netflix me mata!», bromea, aunque sí que avanza que su Marisa de la Vega tiene presencia junto al personaje interpretado por Gorka Otxoa, que encarna a Santi, y a su familia.
Para Lara Martorell, trabajar con Netflix ha sido «una maravilla, estoy muy contenta, te tratan muy bien y son muy respetuosos con todo, y sobre todo con el hecho de estar al lado de gente con premios Goya como Luis Tosar y jóvenes talentos como María Pedraza y Arón Piper, que son un encanto», cuenta sobre el rodaje.
La versatilidad para moverse entre diferentes géneros, su vis cómica y su presencia camaleónica juegan a su favor, «sé que puedo interpretar cualquier personaje y con cada proyecto crezco, siento que voy por el buen camino, poco a poco las cosas van saliendo», sostiene Martorell. Una vida que «no ha sido nada fácil» y que nutrirá otro proyecto, una serie que «narrará mi historia, con acontecimientos muy duros, desde que nació Alberto Martorell, mi versión infantil, hasta la mujer y actriz que soy hoy», concluye.