El fundador de la editorial Planeta, José Manuel Lara Hernández, natural de El Pedroso (Sevilla), falleció la noche del pasado domingo a los 88 años de edad en su domicilio de Barcelona, víctima de una enfermedad degenerativa del sistema nervioso. Los Reyes expresaron su pesar a la familia por la pérdida del editor, destacando su «laboriosidad y extraordinaria contribución» al mundo del libro. La capilla ardiente se instaló ayer en la sede de la Fundación José Manuel Lara en Barcelona, en el número 35 del Passeig de Gracia, por donde pasaron numerosas personalidades del mundo de la política, la cultura y la economía para despedirse de Lara Hernández. El funeral por el alma del empresario, que nació en El Pedroso (Sevilla) el 31 de diciembre de 1914 y fue promotor de los Premios Planeta de Novela en 1952, tendrá lugar hoy.
Lara, hijo de un médico rural, Fernando Lara Calero, y de Inés Hernández, pasó su infancia y adolescencia en su ciudad natal, hasta que se trasladó a Madrid, donde trabajó en varios lugares, incluso participó durante una temporada en el espectáculo de la vedette Celia Gámez, hasta que se incorporó al servicio militar de forma voluntaria. Tomó parte en la Guerra Civil del lado franquista y, al finalizar la contienda, entró en Barcelona como oficial de la Legión, donde se quedó a vivir y conoció poco después a María Teresa Bosch, con quien se casó en 1941. Del matrimonio nacieron cuatro hijos.
Lara trató de poner en marcha una academia de enseñanza general, al mismo tiempo que se dedicaba a pequeñas compraventas de libros, y en 1944 compró la pequeña editorial Tartessos, con la colaboración del exiliado húngaro Oliver Brechfeld, pero estas experiencias no funcionaron. En 1949, fundó la Editorial Lara, que poco después se convertiría en la Editorial Planeta, con el propósito de apostar por autores españoles o que escribieran en España. El empresario andaluz trató de abarcar todo tipo de literatura, sin fijaciones especiales, dejándose asesorar en todo momento por su esposa, cuya influencia en la evolución de la editorial fue decisiva.