El PSOE-M ha cuestionado este lunes que el centro de primera acogida planteado por la Comunidad de Madrid en el cerro de La Cantueña, en Fuenlabrada, solo vaya a acoger a 96 menores extranjeros no acompañados y ha augurado que podría llegar a albergar entre 200 y 300, triplicando su capacidad, «como ya ocurre en otros recursos».
«Es una absoluta barbaridad y es imposible dar salida con una verdadera integración manteniendo la cohesión social que siempre ha habido en la ciudad de Fuenlabrada y hay en muchas otras ciudades», ha lanzado la diputada en la Asamblea Silvia Monterrubio, quien ha presentado junto al portavoz adjunto socialista, Jesús Celada, y la portavoz del PSOE en Asuntos Sociales, Lorena Morales, una Proposición No de Ley sobre la acogida de menores.
En el último Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid el Ejecutivo regional aprobaba 18,7 millones de euros para este centro que contará con 4.000 metros cuadrados y 96 plazas. La Cantueña ha sido objeto de polémica en los últimos meses ante el rechazo del Ayuntamiento y su alcalde, Javier Ayala, a que se establezca ahí un centro de menores --al entender que no cumple las condiciones mínimas para atenderlos bien-- y las medidas legales interpuestas para poder pararlo.
Monterrubio ve en esos casi 19 millones --11,8 para la gestión y 6,9 para acondicionar el inmueble-- la prueba de que no se quedarán en menos de un centenar los menores acogidos y ha señalado que hay recursos en la región pensados para 35 de ellos en los que «están superando los 100 menores».
«Está contraviniendo todas las recomendaciones a nivel internacional a nivel nacional y ya le digo contraviniendo su propia ley de servicios sociales y sin garantizar el derecho de los de los menores», plantea la diputada fuenlabreña, quien entiende que se está «empujando» a estas personas a una situación «de gueto con dificultades de integración».
Un centro "en mitad de la nada"
Según ha descrito la parlamentaria, se encuentra «en mitad de la nada» pegado a un polígono industrial y en el margen contrario de la carretera de Toledo respecto a la ciudad. Es por ello que ha advertido de que los jóvenes tendrían que « caminar durante kilómetros para poder acceder a un centro educativo, a un centro deportivo, a un centro cultural o a un centro sanitario». Para los socialistas madrileños se trata del «máximo ejemplo» de cómo no hay que tratar a los menores para poder «garantizar la integración».
Ha cargado, además, contra la «falta de transparencia y falta de lealtad institucional» por parte de la Comunidad de Madrid respeto al Ayuntamiento de Fuenlabrada, con quien se ha «saltado un compromiso previo», ya que el Consistorio cedió el espacio al Ejecutivo autonómico para un centro de difusión ambiental y no para «un contenedor donde soltar a los menores una vez que lleguen a la región».
Por su parte, el portavoz del Gobierno autonómico, Miguel Ángel García, apuntaba en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno donde se aprobó esta partida, que se están ultimando las obras por lo que «de forma inminente podrá ser utilizado para dar servicio» a los menores.
«Este recurso de primera acogida está diseñado para estudiar y valorar cada caso en su globalidad y proponer, si es necesario, la asunción de una medida de protección, así como orientar la intervención social más adecuada, promoviendo los tratamientos requeridos», añadían desde el Gobierno regional.
Entre tanto, indicaban, el menor residirá de forma temporal en el centro de primera acogida donde tendrá cubiertas todas las necesidades básicas. Desde este tipo de recursos se instruyen los expedientes de aquellos sin referentes familiares que requieren una atención urgente e inmediata.