El presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, ha afirmado este sábado, 13 de julio, que el Ejecutivo regional «tiene el aval necesario» para llevar a término «el cambio político» prometido en las elecciones de 2023, en las que su partido, el PP, obtuvo 28 escaños de 67 en las Cortes autonómicas, subrayando que los ciudadanos dijeron 'sí' al liderazgo de los 'populares' en la comunidad autónoma.
Lo ha afirmado este sábado, en el discurso posterior a la toma de posesión de los nuevos consejeros del Ejecutivo, después de que Azcón renovara este viernes el Consejo de Gobierno tras la dimisión, por acuerdo del Comité Ejecutivo Nacional de VOX, del vicepresidente primero y consejero de Desarrollo Territorial, Alejandro Nolasco, y del titular de Agricultura, Ganadería y Alimentación, Ángel Samper, por el acuerdo de PP y PSOE para el reparto de menores migrantes entre las comunidades autónomas. El Gobierno de Aragón es ahora monocolor, del PP.
Con esta reorganización del Ejecutivo, Azcón responde «con rapidez, determinación y eficacia» a «las circunstancias», recalcando: «Los servidores públicos no podemos ni debemos reparar en el calendario ni en el reloj».
Ha observado que «lo verdaderamente determinante son los hechos», ya que es lo que deja «huella», y no «las controversias temporales». «Frente a lo efímero de lo prometido, está lo sustancial de los hechos, que son irrefutables».
Calidad de vida
El jefe del Ejecutivo autonómico ha enumerado algunos logros de este primer año de legislatura en beneficio de la calidad de vida de los aragoneses, apuntando que la tasa de paro es hoy más baja que la de septiembre de 2008.
Ha mencionado la captación de 22.000 millones de euros en inversiones empresariales; el ahorro ciudadano en 52 millones de euros en impuestos; la aprobación del Presupuesto más elevado de la historia de la Comunidad Autónoma; el impulso al Plan Pirineos y al Fondo de Transición Justa; el Plan Aragón Más Vivienda, dotado con 300 millones de euros que serán ampliados; la mejora del transporte sanitario terrestre y el Plan Extraordinario de Carreteras.
«Sólo aspiro a haber dejado todo mi esfuerzo, mi capacidad y mi trabajo en el empeño de construir e impulsar un Aragón mejor, con más oportunidades para todos los aragoneses y del que todos podamos sentirnos orgullosos», el «único afán» de su Gobierno en los tres próximos años de legislatura.
La constitución y el estatuto, "innegociables"
Jorge Azcón ha advertido de que es «un deber supremo e innegociable» cumplir y hacer cumplir tanto la Constitución de 1978 como el Estatuto de Autonomía: «Es en ambas normas superiores donde los aragoneses y el conjunto de los españoles encontramos refugio ante injusticias y desigualdades; donde se haya el seguro de nuestra convivencia en libertad y de nuestra identidad».
Ha incidido en que en estas más de cuatro décadas de democracia se ha edificado una democracia que, «más que nunca, no podemos dar por hecho» y ha urgido a «impedir que el ruido, la mentira o los deseos de unos pocos amenacen los pilares básicos de un sistema democrático de convivencia que nos ha llenado de prosperidad al conjunto de los españoles en la mejor etapa de nuestra historia».
El presidente de la Comunidad Autónoma de Aragón ha realzado que las medidas implementadas en este primer año de legislatura han situado a Aragón como «un ejemplo de prosperidad, innovación y avance social y económico».
«Lo vamos a seguir haciendo como siempre, al amparo del diálogo y la negociación y de la escucha activa de nuestros ciudadanos, a quienes realmente nos debemos», ha garantizado.
Azcón ha sido tajante: «Seguiremos defendiendo a los aragoneses, en cualquier circunstancia y lugar que sea necesario, de cualquier atisbo de injerencia, desigualdad o agravio, venga de donde venga». Además, el Gobierno regional no permitirá «que los aragoneses se conviertan en ciudadanos de segunda en una España que debe seguir fiel a los principios esenciales de unidad, solidaridad e igualdad».
Ha finalizado subrayando que su propósito es «que cada medida y acción resuelva un problema, que cada medida y acción piense en aumentar el bienestar de las familias y en ofrecer más oportunidades a las personas en un Aragón más libre, más justo y más solidario».