La ciudad de Zaragoza ha rendido un sentido homenaje a los nueve voluntarios y voluntarias municipales fallecidos en el último año, en el acto conmemorativo que cada año se celebra en esta fecha en el antiguo cementerio de Torrero.
El consejero de Participación y Régimen Interior, Alfonso Mendoza, ha presidido la conmemoración, acompañado por un nutrido grupo del cuerpo municipal de Voluntarios por Zaragoza, y por representantes de los grupos municipales, en un acto cargado de emoción en recuerdo por los que ya no están.
En primer lugar, Mendoza ha saludado a los familiares en la capilla de Yarza, a la entrada del camposanto, que ha servido de punto de encuentro para todos los participantes. Desde allí ha salido la ofrenda floral que, en comitiva y flanqueados por los voluntarios, ha recorrido la parte antigua del cementerio hasta llegar a la plaza del Voluntariado, donde ha comenzado el acto dirigido por la voluntaria Isabel Mainar.
El consejero municipal ha tenido unas palabras de reconocimiento para los voluntarios que de forma desinteresada y altruista prestan siempre su ayuda a la ciudad. «Hoy es 8 de julio y como cada 8 de julio desde hace doce años nos reunimos en este emblemático espacio de nuestra ciudad para rendir un sentido recuerdo y homenaje a los voluntarios por Zaragoza que han fallecido. Un acto muy especial, íntimo, pero muy grande en cuanto a sentimientos», ha expresado.
Mendoza ha nombrado a los voluntarios fallecidos: Arturo Tutor, Miguel Ángel Magallón, Jorge Bescós, Venancio Abad, Josefa Hortal, Martín Ortín, Maricarmen Ostalé, Esther Martínez y José Antonio Palomares, y ha agradecido a sus familiares la presencia en este acto.
«Hoy tenemos sentimientos de tristeza al recordar al ser querido, al amigo, al compañero que ya no está con nosotros, pero debemos reconfortarnos por el amor y la dedicación que tuvieron con esta ciudad», ha manifestado. Ese espíritu que hoy se recuerda «es el que encarnaron Arturo, Miguel Ángel, Jorge, Venancio, Josefa, Martín, Maricarmen, Esther y José Antonio».
El consejero de Participación ha continuado dicendo: «Ellos han sido, como sois el resto de voluntarios, la cara amable de la ciudad. Colaboraron en cualquier de las acciones en las que se pidió ayuda. Ellos fueron, vosotros sois, parte de los momentos importantes de nuestra ciudad. Los que ya no están con nosotros y el resto de voluntarios sois parte de la memoria colectiva de Zaragoza», ha destacado.
Por ello, «nunca debe faltar este pequeño gran homenaje a los que prestaron su tiempo y su empeño para hacer nuestra ciudad más amable y sencilla de disfrutar», ha concluido.
Esta celebración se hizo por primera vez en 2013 en el primer aniversario del fallecimiento de Ana Aznar, trabajadora de la Oficina del Voluntariado. Desde entonces, se ha celebrado en memoria de todos los voluntarios, a excepción del 2020 por impedimento de la pandemia.
Tras las palabras del consejero, los asistentes han depositados flores en la escultura de la Paloma, un ramo de claveles por cada uno de los voluntarios fallecidos durante el último año, mientras la conductora del acto leía en alto sus nombres. A continuación, la viuda de uno de los voluntarios fallecidos, Miguel Ángel Magallón, ha leído el himno a los voluntarios que escribió su marido, que comienza con esta estrofa: «Somos los voluntarios/ Servir es nuestra razón/ siempre los solidarios/ nos damos de corazón».
El emotivo homenaje ha estado amenizado por los músicos de la Escuela Municipal de Música y Danza y del Servicio de Educación, Oscar Carreras y Vanesa García, quienes entre otras piezas han interpretado el 'Ave María' de Mascagni, 'Aleluya' de Cohen y 'Nella Fantasia' de Morricone.