La alcaldesa de Zaragoza, Natalia Chueca, ha anunciado que el nuevo servicio Bizi comenzará a desplegarse por las calles de la ciudad a partir de enero de 2025, con la previsión de que el número de abonados, que está en torno a los 12.000 usuarios en la actualidad, «en un par de años se haya multiplicado por cinco».
«Y creo que me puedo quedar corta», ha asegurado Chueca en la presentación de este nuevo servicio, adjudicado el pasado mes de marzo por diez años a la UTE Serveo Servicios y PBSC Urban Solutions, del que ha destacado que llegará a más barrios, aumentará el número de bicicletas en las calles y será más accesible para más perfiles al incorporar bicicletas de pedaleo asistido --eléctricas--.
La alcaldesa, que ha probado un prototipo de estos vehículos, ha dicho que son «una maravilla» y que el sistema de conducción es «una gozada», al pasar de bicicletas mecánicas a asistidas.
El doble de bicicletas y de estaciones
El servicio previsto duplicará prácticamente el actual --1.300 bicicletas y 130 estaciones-- y contará con un total de 2.500 bicicletas de pedaleo asistido y 276 estaciones de anclaje. Los fondos europeos facilitarán con 6,5 millones de euros la financiación de 2.180 vehículos y cien estaciones, y el resto se asume con fondos municipales.
Todo ello hará posible la extensión del servicio a todos los distritos de Zaragoza, así como la posibilidad de realizar trayectos más largos. Además, los pliegos recogen que el nuevo Bizi operará las 24 horas del día, dando respuesta a una petición realizada a lo largo de los años por parte de las personas usuarias.
En definitiva, será un modelo «mucho más cómodo» que conseguirá que la capital aragonesa siga creciendo en lo relativo a la movilidad sostenible, ha subrayado Chueca.
El objetivo es que, a principios de enero, estén disponibles las primeras cien estaciones con mil bicicletas y que el total del contrato esté implantado a finales de 2025.
Las nuevas bicicletas, además de ser «cómodas», podrán alcanzar los 25 kilómetros por hora, una velocidad «razonable» para circular por la ciudad, según la alcaldesa. Asimismo, se podrán utilizar como una bicicleta mecánica clásica o con pedaleo asistido, con un esfuerzo físico «mucho menor», con lo que se promueve la movilidad sostenible, pero también la movilidad activa y la salud de los zaragozanos.
La regidora ha resaltado que el Ayuntamiento va a hacer «un esfuerzo económico importante» en la bici pública, con una inversión de casi 46 millones de euros en los diez años de vigencia del contrato, casi 20 millones menos que el presupuesto base de licitación, que incluye el suministro de bicicletas, sus baterías, las estaciones y su montaje, así como su gestión y mantenimiento y los suministros necesarios.
Un precio por concretar, pero "asumible"
En cuanto al precio del nuevo servicio, ha señalado que se concretará cuando se implante, en 2025, pero ha adelantado que será «superasequible» y que será «asumible», en torno a los 60 euros anuales. Además, habrá bonificaciones para algunos colectivos y durante el primer año, hasta que se complete la implantación total, habrá una tarifa algo más reducida.
Está prevista la creación de bonos anuales, como en el actual servicio Bizi, aunque también para usos esporádicos, pensando también en los turistas o en personas que sólo quieran utilizarla de manera ocasional.
Los actuales abonados a Bizi recibirán en los próximos meses una comunicación en la que se les invitará, de manera preferente, a reservar su plaza en el nuevo sistema. También está prevista la devolución de la diferencia de abono no gastado cuando este servicio dé paso al nuevo.
Se está organizando todo de manera que haya un plazo de pocas semanas, el mínimo posible --a final de año--, en el que se haga la transición entre sistemas, por lo que en esos días no se prestará el servicio de forma temporal.
El principal reto logístico para la implantación del nuevo sistema será el de las conexiones eléctricas. Tanto los servicios de Movilidad Urbana como los de Infraestructuras, entre otros, están ya trabajando desde hace meses de manera coordinada para intentar evitar cualquier retraso en este ámbito.
Funcionamiento similar al servicio bizi actual
El sistema funcionará de manera muy parecida al actual Bizi en cuanto al uso de las bicicletas y sus anclajes, aunque el acceso a los vehículos se podrá hacer con tarjeta de usuario o a través del teléfono móvil, tanto con la aplicación propia como con la aplicación municipal de 'Mobility as a Service' que está desarrollando el Consistorio.
Como sucede actualmente, habrá un tiempo máximo para cada uso, que inicialmente será de dos horas, pero habrá una penalización económica cuando se superen los primeros 60 minutos para evitar que la bicicleta quede acaparada por una única persona durante demasiado tiempo.
Chueca ha enmarcado este impulso a la movilidad sostenible, en una ciudad que tiene la mayor red de carriles bici de España junto a Sevilla, con la renovación de la flota de autobuses urbanos para que un tercio sean eléctricos o la ampliación de la capacidad del tranvía en un 10%.
En otro orden de cosas, ha indicado que, recientemente, pudo mantener una conversación informal con el secretario general de Movilidad Sostenible en Mobility City en torno a los 28 millones de fondos europeos de ayudas al transporte pendientes de cobro y le transmitió que estaban «un poco atascados», pero que este pago se resolvería «enseguida».