La A-15, la AP-1 y la AP-8, principales carreteras de Gipuzkoa, se encuentran colapsadas tras el fin de la protesta de tractores en Biriatou. Las retenciones provocadas por el comienzo de circulación de los vehículos pesados también afectan a la N-1 y a la N-121A. Las retenciones alcanzaban, pasadas las 11.00 horas, los 25 kilómetros en la AP-8 sentido Baiona.
La protesta de tractores de los agricultores de distintas organizaciones agrarias de Álava y Gipuzkoa, que se inició este pasado lunes, suponía bloquear durante 24 horas, desde las diez de la mañana del lunes a las diez de la mañana de este martes, el paso de vehículos pesados.
Entre otros objetivos, están reclamar la «eliminación de impuestos a la energía utilizada como medio de producción para el sector agrario», así como «mayor seguridad alimentaria para los productos que ingresan a Europa» y la aplicación de «una ley europea que dé preferencia de los productos locales».
Pese a que el paso de Biriatou, en la AP-8 ya ha quedado abierto a todos los vehículos, la acumulación de camiones que no habían podido transitar por las carreteras guipuzcoanas está ocasionando el colapso de las vías, según informa la Dirección de Tráfico del Gobierno Vasco.
Las retenciones, pasadas las once de la mañana, alcanzaban desde la frontera en Irun hasta Urnieta, un tramo de unos 25 kilómetros en el que el tráfico es muy lento.