El servicio de teleasistencia del Ayuntamiento de Zaragoza ha incorporado nuevas tecnologías para mejorar el servicio, que sea más personalizado y detectar mejor los riesgos, en un momento en el que ya no hay lista de espera, después de que el último año se incrementara el número de personas usuarias hasta alcanzar 15.100 en toda la ciudad --3.700 en la modalidad preventiva y 1.073 en la de dependencia--.
En total, este servicio, gestionado por la empresa Atenzia, recibe unas 200.000 pulsaciones de alarma al año y realiza casi 600.000 llamadas al año a las personas usuarias, tres veces más, con lo que, al final, en la práctica, ha pasado a ayudar más con la soledad que con las emergencias.
La alcaldesa de la ciudad, Natalia Chueca, ha visitado este jueves junto a la consejera municipal de Políticas Sociales, Marian Orós, las instalaciones de Atenzia y ha definido la teleasistencia como un «botón amigo»: «el botón de la autonomía» y «el botón de la tranquilidad».
Durante la visita, la alcaldesa ha llamado a Dolores, que con 108 años es la usuaria más longeva del servicio y se ha mostrado satisfecha con el mismo, aunque no ha tenido que usarlo demasiado, pese a su edad, porque se encuentra bien y sólo tiene algún problema de audición.
En este sentido, ha insistido en que las personas mayores son «fundamentales» para el equipo de gobierno porque «todos tenemos padres y madres que quieren seguir siendo autónomos en su casa, pero que necesitan sentirse tranquilos en caso de una caída o una bajada de azúcar» y la teleasistencia ofrece «autonomía» y «tranquilidad» a los familiares.
"amplia demanda" del servicio
De los 4.773 nuevos usuarios, el 77% son mujeres, ha apuntado Chueca, quien ha subrayado la «amplia demanda» que tiene el servicio, del que están «orgullosos» en el Ayuntamiento por la «sensibilidad», «implicación» y «dedicación» del equipo, y ha achacado este aumento al aumento de la esperanza de vida y el deseo de las personas mayores de mantener una vida activa y autónoma.
«Estas cifras demuestran la amplia demanda de este servicio municipal al que el Ayuntamiento de Zaragoza destina 2,8 millones de euros al año en un presupuesto social histórico en la ciudad, de 100 millones», ha apuntado la alcaldesa.
Del mismo modo, ha considerado que el número de usuarios se incrementa porque hay más medios y se gestionan de una forma «muchísimo más ágil».
Además, el hecho de que no haya ya lista de espera es, a juicio de la alcaldesa, un «indicador claro» del compromiso del Consistorio zaragozano con las personas mayores y ha recordado que «esto no siempre ha sido así» ya que en el pasado sí que había lista de espera para entrar en este servicio.
Incorporación de nuevas tecnologías
En cuanto a las nuevas tecnologías incorporadas, ha destacado las existentes para detectar riesgos como humos, la presencia continua dentro del hogar, riesgos de caídas o escapes de gas.
Para ello, hasta 640 dispositivos utilizan la tecnología «al servicio de las personas mayores». También se está aplicando la geolocalización para evitar pérdidas o que estas personas se desorienten y existen protocolos específicos para momentos de duelo, patologías crónicas o problemas de salud mental y riesgo de suicidio, además de aquellos centrados en evitar la soledad no deseada o favorecer el envejecimiento activo.
Por ejemplo, de cara al verano y a los episodios de calor, además de campañas específicas, existen dispositivos para colocar en la nevera y así controlar la hidratación de estas personas.
En concreto, se han introducido 204 detectores de humo, 323 detectores de presencia, 108 de caídas y otros cinco detectores de gas, que se asignan a personas usuarias en función de una valoración personalizada y multidimensional. En total, se instalarán 900 dispositivos periféricos de estos ámbitos a lo largo del contrato.
Otra novedad es la asignación de dispositivos de teleasistencia móvil, con los que ya cuentan 45 personas de acuerdo a su nivel de riesgo y que permiten una geolocalización ante situaciones de riesgo o desorientación. En total, se instalarán 150de estos modelos.
El objetivo de estas mejoras es atender de manera urgente cualquier emergencia que sufran las personas usuarias en su domicilio, así como realizar un seguimiento de su situación, facilitar su autonomía personal y posibilitar su estancia en el hogar y en su entorno social.
Modelo de atención centrada en la persona
Estas mejoras de teleasistencia avanzada están vinculadas al denominado Modelo de Atención Centrada en la Persona (ACP), según el cual las personas usuarias reciben un servicio adaptado a sus necesidades, gustos y preferencias. Para ello se realiza una valoración integral en las áreas funcional, social, salud y mental, y se diseña un plan de atención personalizado que es evaluado periódicamente.
Con el objetivo específico de paliar los efectos de la soledad no deseada en las personas mayores, y mejorar su bienestar y calidad de vida, se ha iniciado el programa Zaragoza Acompaña, para lo que se van a realizar sesiones presenciales el grupo.
Las primeras de ellas han comenzado ya en el centro de convivencia de mayores Salvador Allende, en el distrito de Las Fuentes, lideradas por una psicóloga de Atenzia. En estas reuniones se desarrollarán diferentes dinámicas grupales, fomentando la creación de vínculos entre las personas asistentes que perduren una vez finalizado el programa, reforzando así su red de apoyo social.
Otra novedad del contrato es el Programa de Envejecimiento Activo, que pretende potenciar la autonomía de las personas usuarias para que puedan permanecer en su domicilio el mayor tiempo posible y en las mejores condiciones.
Como parte de esta iniciativa ya se han puesto en marcha dos puntos móviles de asesoramiento para toda la ciudadanía, ubicados y atendidos por psicólogos y trabajadores sociales. En ellos se ha abordado la promoción de los hábitos de vida saludables y la prevención de la depresión en personas mayores.