El alcalde de Sevilla, el popular José Luis Sanz, ha asegurado este jueves, tajantemente, que no piensa pactar un gobierno de coalición con Vox, partido este último que asegura que hay negociaciones «en buen camino» mientras el PP lo niega por completo; anunciando en paralelo que elevará finalmente al pleno su proyecto presupuestario de 2024, para el cual no cuenta aún con consenso político para su aprobación; y en caso de no prosperar planteará una cuestión de confianza vinculada al propio presupuesto.
En declaraciones a los medios de comunicación, José Luis Sanz ha manifestado que durante el mandato en curso siempre ha «reivindicado el derecho a gobernar en minoría» con 14 concejales de un total de 31.
En ese sentido, en un marco en el que el PP ejerce el gobierno en minoría y solitario, con los presupuestos prorrogados de 2023, diseñados por el anterior Ejecutivo local del PSOE, al no mediar acuerdo para unas nuevas cuentas; Sanz ha asegurado que no piensa «pactar con Vox» un acuerdo de gobierno porque quiere «seguir gobernando en solitario».
En paralelo, ha anunciado que prevé elevar al pleno, en la primera semana de junio, el proyecto presupuestario que había diseñado su equipo de Gobierno, unas cuentas de las que desistió de presentar al pleno, después de que las mismas encontrasen el «no» previo de todos los grupos de oposición en los órganos de gobierno de la Gerencia de Urbanismo, el IMD, el Instituto de la Cultura y las Artes (ICAS), la Agencia Tributaria, el Patronato del Real Alcázar y la sociedad Congresos y Turismo de Sevilla (Contursa).
«Seguramente fue un error no presentar el presupuesto, pero no lo vi necesario por el no (de la oposición) en las comisiones informativas» previas, ha reconocido Sanz.
En ese sentido, ha manifestado que con la elevación al pleno del nuevo proyecto presupuestario, habrá «una nueva oportunidad» para reconducir la situación presupuestaria, recordando que las cuentas prosperarían con la mera abstención de la oposición y señalando especialmente al PSOE, porque dicho partido, si facilita la aprobación del nuevo presupuesto, puede «evitar la entrada en el gobierno local de esa como llaman ultraderecha», en alusión a Vox.
«Tienen la oportunidad de evitar la posible entrada en el gobierno local de lo que llaman la ultraderecha», ha insistido Sanz, recordando que la ciudad «necesita un presupuesto» actualizado y apelando a la «responsabilidad» de los grupos.
En caso de que el presupuesto no prospere en el pleno, según ha dicho, plantearía previsiblemente una «cuestión de confianza vinculada al presupuesto», mediante la cual si tampoco sale adelante la propuesta del Gobierno local, los grupos de oposición tendrían un mes para formalizar una moción de censura que se antoja impracticable al necesitar la unión del PSOE, Vox y Podemos-IU. «Si no se presenta esa moción de censura, el presupuesto quedará automáticamente aprobado», ha rematado Sanz.