El centro tecnológico AZTI impulsa proyectos por valor de más de 150 millones de euros en Euskadi, enfocados en la generación de nueva actividad económica y empleo de calidad. Además, la organización en 2023 de congresos internacionales como, entre otros, la Feria Food4Future o el Congreso Científico de ICES supusieron un retorno de 18,5 millones de euros para la Comunidad Autónoma Vasca.
En ese sentido, el centro ha destacado en un comunicado que, además de ser agente en el ecosistema científico e investigador, cuenta también con una «clara vocación de impacto en la economía vasca».
El centro tecnológico ha destacado que, más allá de la generación y transferencia de conocimiento, ha catalizado proyectos por valor superior a 150 millones de euros, enfocados en la generación de nueva actividad económica y empleo de calidad en Euskadi.
Casi 24 millones de actividad propia
Como actividad propia, el ejercicio del 2023 ha supuesto un volumen de actividad de 23,7 millones de euros y el resultado ha sido de 560 miles de euros y un cash-flow de 1,1 millones de euros. La generación de cartera ha alcanzado los 27,8 millones de euros y supondrá una producción en 2024 de 25,6 millones de euros.
El CEO de AZTI, Rogelio Pozo, ha destacado que los proyectos del centro tecnológico generan valor añadido a sus clientes e instituciones, y también empleo directo de más de 300 personas e indirecto estimado en 220 empleos, lo que incluye personal científico y técnico, así como personal de apoyo y colaboradores.
Además, la investigación y la innovación que desarrollan, ha apuntado, impulsan el crecimiento económico al fomentar la creación de nuevas empresas y oportunidades de nuevos negocios, así como ahorros en recursos para las empresas privadas con las que colaboran.
Según ha indicado, destaca la construcción de una biorrefinería en Zambrana (Álava) para fomentar la economía circular y valorizar subproductos de origen vegetal y del sector vinícola, que cuenta con una inversión de 32 millones de euros. Este proyecto se lleva a cabo en colaboración con la empresa local UVA y promete ser un modelo de innovación y sostenibilidad.
Asimismo, AZTI está impulsando en la comarca de Oarsoaldea (Gipuzkoa) seis nuevas empresas especializadas en la economía azul con alcance en electrificación de barcos, buques autónomos, plataformas marinas, bio-productos marinos y productos pesqueros de quinta gama. Estas iniciativas empresariales se encuadran en el marco del HUB de economía azul impulsado por el Gobierno Vasco que se está construyendo en el puerto de Pasaia y que conlleva una inversión superior a los 10 millones de euros, con una aportación de fondos públicos de 2,5 millones de euros.
El polo de economía azul de Oarsoaldea tiene como propósito fomentar la actividad económica y el desarrollo social mediante la promoción de una explotación más sostenible de los mares y sus recursos.
Para el año 2024, se destinarán cinco millones de euros a tres empresas de base tecnológica impulsadas por AZTI, en colaboración con otros socios. Se trata de Saretu, enfocada en la recogida y reciclaje de redes atuneras; DataFish, dedicada a mejorar la observación a bordo de barcos pesqueros; e Itsas Balfegó, que tiene como objetivo la instalación piloto de una granja acuícola para atunes rojos en Getaria.
Inversión en i+d
Junto a ello, la inversión de AZTI en I+D también genera oportunidades para el desarrollo económico de Euskadi participando e impulsando de forma activa en iniciativas y proyectos tecnológicos e innovadores, compromiso que, según ha destacado Pozo, «forma parte de nuestro propósito desde nuestra fundación en 1981 y es parte del legado que estamos transmitiendo a la sociedad».
A modo de ejemplo, en el año 2000 AZTI transfirió tecnología para la creación de la empresa Bionor (hoy Gunvor Biodiesel) en Berantevilla (Álava) para producir biodiesel a partir de aceites usados.
Esa iniciativa dio lugar a la creación de otras dos empresas: Ekogras en Gipuzkoa y Rafrinor en Bizkaia, para la recogida y gestión de aceites usados a través de los contenedores naranjas. Estas tres empresas facturan actualmente unos 25 millones de euros y emplean a 70 personas.
Más recientemente, otra muestra de colaboración exitosa ha sido el lanzamiento de Air Nuts, en cooperación con Uriarte Iturrate del Grupo Ecolumber, un snack, que incorpora hasta un 86% de frutos secos.
AZTI ha informado de que Air Nuts ha generado ingresos de 22 millones y proporcionando empleo a 12 personas, el 50% mujeres y que continúa su expansión internacional con un catálogo de nueve productos innovadores.
El CEO de AZTI ha destacado que la organización lidera la investigación en sectores como la pesca, la alimentación y el impacto del cambio climático en los recursos marinos. Según ha dicho, por cada euro invertido en I+D, las empresas invierten entre 7 y 15 euros de nueva actividad económica, dependiendo del sector.
Eventos internacionales
En 2023, el centro tecnológico organizó eventos internacionales como la Feria Food4Future y el Congreso Científico de ICES, que han generado un retorno económico directo de 18,5 millones de euros para la región, y con una participación de 9.000 asistentes de 35 países.
Azti ha destacado que estos eventos tienen un «importante impacto» en la economía local, junto a lo cual las 205 empresas asociadas de AZTInnova, cerca de la mitad de ellas vascas, se benefician de la exposición en plataformas internacionales como la feria Food4Future. y adicionalmente, la entidad ha establecido 180 acuerdos estratégicos de colaboración, en su mayoría en Euskadi.
Asimismo, ha destacado que encabeza la lista de entidades españolas con mayor financiación pública competitiva estatal y europea en proyectos de pesca y acuicultura de las últimas dos décadas gracias a programas como Horizonte, de la Unión Europea, o TransMisiones, del Centro para el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (CDTI) del Gobierno de España.
También colabora con la Secretaría General de Pesca en el desarrollo de 17 proyectos relacionados con la gestión sostenible de las pesquerías mediante un convenio financiado con 3 millones de euros de los fondos Next Generation en el marco del Plan Nacional de Recuperación, Transformación y Resiliencia.
Además, ha logrado contrataciones por valor de medio millón de euros en concursos públicos con la Junta de Andalucía, para realizar dispositivos portátiles de identificación y detección de biotoxinas marinas en moluscos bivalvos, y con la Agencia Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA), para un proyecto que busca identificar y priorizar las necesidades de datos de la EFSA y avanzar en la evaluación de riesgos para la salud humana y animal, así como los riesgos medioambientales.
Pozo ha asegurado que en Azti, cada paso «está imbuido de una visión a largo plazo, donde la generación de valor no se mide solo en términos de resultados inmediatos, sino también por el legado que dejamos para el mañana» y ha subrayado que aspiran a construir «un mundo donde la ciencia y la tecnología sean aliadas del progreso humano en la armonía ecológica con los recursos naturales».