La presidenta de la Comunidad y del PP de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha sostenido que el candidato de Junts a las elecciones catalanas, Carles Puigdemont, y el del PSC, Salvador Illa, están en una carrera para ver «quién es más separatista, más liberticida» y «más demagogo».
Así lo ha señalado durante su intervención inicial en el desayuno informativo, organizado por Nueva Economía Fórum, que protagoniza este lunes en el Hotel Ritz el portavoz del Grupo Parlamentario Popular en el Congreso, Miguel Tellado.
En primer lugar, la dirigente madrileña ha sostenido que «Europa no da crédito ante lo que está sucediendo estos días» en los que «la corrupción más obscena, que es la que se pergeña a la cara de todos los españoles, verá pronto la luz: la Ley de Amnistía».
«La Constitución española se está reinterpretando al interés de Pedro Sánchez. Y de ahí, porque están todos detrás de lo mismo, que el expresidente Zapatero diga que el reconocimiento nacional de Cataluña cabe en la Constitución. Últimamente, si se dan cuenta, todo lo que le interesa a Sánchez cabe en la Constitución», ha criticado a continuación. Mientras, para Ayuso, Illa está recurriendo «al nacionalimos asimétrico, nación de naciones» y a «lo mismo de siempre, a todo tipo de fábricas para intentar dar abono al nacionalismo».
«Nos debatimos entre el señor Illa, que ha sido el peor ministro de la pandemia y que ha tenido que ser tutelado, amadrinado diariamente por Pedro Sánchez desde La Moncloa con el dinero de todos los madrileños y de todos los españoles con todo tipo de promesas, el ministro que ha realizado la gestión más calamitosa en todos los sentidos que se recuerda en Europa, o Puigdemont, el prófugo de la Justicia», ha subrayado.
La presidenta regional ha sostenido que es «la izquierda de los privilegios contra lo que llamaban la derechona catalana, con la que salvó el reparto del dinero de todos los españoles y la impunidad ante la Justicia». Considera que nada tienen que ver y que «se desprecian entre ellos». De hecho, ha incidido en que «solo les une el desprecio por la ley, por las instituciones» y por cualquiera que les dificulte «hacer lo que les dé la misma gana con el dinero y la nación de todos».
«Han sido capaces de dejar sin agua a los catalanes y ahora les van a dejar sin aire en esa carrera para ver quién es más separatista, más liberticida, más demagogo. Y, por supuesto, que volverá la misma miseria de siempre: el referéndum, las consultas ilegales, la utilización de los espacios públicos de todos los catalanes para dividirles y, por supuesto, la autodeterminación», ha augurado, para a renglón seguido defender que quien quiera en Cataluña «constitucionalismo» con «ideas solventes» debe apostar por el PP.