El conductor del autobús L10 que cayó en unas obras de un aparcamiento en la carretera de Esplugues de Llobregat (Barcelona) este lunes sufrió una indisposición, según han explicado fuentes de la empresa de autobuses a Europa Press este martes.
El conductor del bus, que comenzó su jornada a las 13.30 horas, informó 17 minutos más tarde por la emisora que «se encontraba mareado», e inmediatamente se le instruyó para que parase el vehículo.
Al no poder continuar la comunicación con el conductor, se solicitó una ambulancia para que se desplazara hasta el lugar de los hechos.
«Minutos después supimos que el bus se había precipitado por un desnivel por obras», han añadido las fuentes y, como resultado, 15 pasajeros del autobús necesitaron asistencia médica: uno de ellos resultó herido crítico y varios graves, que fueron trasladados a los hospitales de Bellvitge y Moisès Broggi.
Desde la empresa, han querido desear una «pronta recuperación» a todas las personas heridas durante el accidente, incluido el conductor.