La Unidad de Próstata del Hospital Viamed Montecanal ha realizado recientemente las primeras cirugías de hiperplasia benigna de próstata mediante el robot Aquabeam en Aragón.
Se trata de una novedosa técnica poco invasiva que permite la ablación del tejido prostático --de hiperplasia benigna de próstata-- mediante un jet o chorro de suero fisiológico (agua + cloruro sódico) a una velocidad muy alta y presión elevada a través de un sistema robótico guiado mediante un doble sistema. Por una parte hay un control ecográfico de la próstata y, por otra, se visualiza con un control endoscópico.
Se elimina la parte del tejido prostático que por su crecimiento obstruye el cuello de la vejiga y dificulta o impide la micción. Esta intervención se practica en casos de crecimiento benigno de la próstata.
La hiperplasia de próstata provoca un crecimiento benigno de la glándula prostática que tiene relación con la edad. Esta patología provoca una obstrucción en la salida de la orina, lo que dificulta el paso de la misma, con síntomas muy desagradables para los pacientes. Esta situación provoca importantes afecciones a su calidad de vida, como la dificultad en el inicio de la micción, el aumento de la frecuencia miccional, la incontinencia, y, en el caso final, la retención aguda de orina con la necesidad de colocar una sonda en el vejiga, entre otras.
El sistema novedoso de cirugía robótica Aquabeam, que se acaba de ponen en funcionamiento en Viamed Montecanal, es una técnica segura y muy precisa, ya que, a la precisión del robot, se suma el control por parte del cirujano mediante una visión ecográfica y endoscópica in vivo. Ello permite una ablación con la máxima precisión y seguridad, sin la necesidad de utilizar ningún tipo de energía térmica y en pocos minutos.
El equipo de urólogos especialistas en cirugía robótica del hospital Viamed Montecanal compuesto por los doctores Jorge Rioja, Paula Gayarre, David García Belmonte y Jaume Pelegrí, ha sido el encargado de realizar estas primeras intervenciones con esta técnica puntera.
«Esta tecnología ha venido para quedarse y hay que ponerla al servicio de la salud de nuestros pacientes para intentar mejorar los tratamientos quirúrgicos realizados hasta la fecha», ha asegurado el doctor Rioja, quien ha añadido que varias ciudades españolas que cuentan ya con el robot Aquabeam: «Ahora estamos contentos de que los pacientes aragoneses se puedan beneficiar de esta tecnología, al igual que lo han hecho con el robot Da Vinci». Una de las mayores ventajas para los pacientes es la mínima estancia hospitalaria de los pacientes.
Por su parte, el doctor Pelegrí ha asegurado que este tratamiento «permite tratar próstatas de cualquier volumen, siendo mínimamente invasivo, sin provocar daños térmicos a las estructuras vecinas, permitiendo realizar el procedimiento de una manera rápida y precisa, con un postoperatorio que va desde las 24 a las 48 horas de hospitalización. Todo esto permite que el paciente pueda volver antes a su vida cotidiana».
El doctor García Belmonte ha subrayado las garantías que para profesionales y pacientes ofrece esta técnica. «Es un sistema seguro, aprobado y con una sólida evidencia científica, ya que su uso se ha extendido tanto en Estados Unidos como en diferentes capitales de Europa».
Asimismo, ha informado que «esta técnica nos permite operar a los pacientes, acortando el tiempo quirúrgico, pasando de 45 minutos, que es la duración media de una intervención con otras técnicas,, a solo de 3 a 6 minutos. Además, se preservan al máximo las tasas de función sexual y eyaculatoria, en 9 de cada 10 pacientes». Se trata de «una técnica más en la armamentística terapéutica de los cirujanos, pero hay es necesario individualizar y estudiar bien los casos, ya que no todos los pacientes son candidatos a este tipo de técnicas», ha afirmado García Belmonte.
Dicho tratamiento se suma a los procedimientos mínimamente invasivos que ya ofrece la Unidad de Próstata del hospital, pionero en Aragón en cirugía robótica aplicada a la urología, y que incluyen también técnicas como la HoLEP, el láser verde, la ablación con vapor de agua (Rezum), la incisión fría de la próstata (iTind) y el Urolift o «grapa prostática»