La magistrada Concepción Gimeno Gracia ha jurado este viernes, 16 de febrero de 2024, su cargo de Justicia de Aragón en sesión plenaria extraordinaria de las Cortes autonómicas, en un acto en el que han estado presentes el jefe del Ejecutivo aragonés, Jorge Azcón, y todos los consejeros. Ha prometido velar por los derechos de los más vulnerables y «propiciar consensos».
Gimeno ha entrado en el Salón de Plenos acompañada de la presidenta del Parlamento, Marta Fernández, y, ante todos los diputados y el Gobierno de Aragón al completo, ha jurado su cargo sobre sendos ejemplares de la Constitución española de 1978 y el Estatuto de Autonomía de Aragón.
En su intervención ante el Pleno, la nueva Justicia ha destacado que es la primera mujer Justicia «en una sociedad, la aragonesa, que viene transmitiendo su deseo de hacer efectivo el derecho de igualdad de la mujer en el acceso a las responsabilidades públicas».
«Soy plenamente consciente de la relevancia histórica, de la importancia, del respeto, del inmenso cariño que el Justicia de Aragón posee en nuestra tierra y que asumo, sin fisuras, esta enorme responsabilidad», ha continuado Gimeno, quien ha elogiado a quienes le han precedido en su cargo.
Ha pedido a todos su colaboración, apoyo y comprensión, señalando que su nueva andadura está destinada a «servir al pueblo aragonés», lo que llevará a cabo «sin escatimar esfuerzo».
"en todo el territorio"
La nueva Justicia defenderá «los derechos y libertades de los aragoneses y aragonesas, individuales y colectivos, con acercamiento al ciudadano y facilitando su acceso a la institución, evitando que cualquier formalidad no esencial impida nuestra actuación».
La Justicia estará presente en «todo el territorio» y velará por los derechos de los más vulnerables, mencionando a los menores, adolescente, mayores, mujeres víctimas de discriminación o violencia, personas con discapacidad, enfermos, migrantes, desempleados, personas sin recursos, seres humanos en riesgo de exclusión por cualquier motivo o circunstancia. Velará «por todas aquellas personas necesitadas no sólo de ayuda, sino también de protección».
«Tanto en mi ejercicio profesional como en mi vida personal, he podido percibir que, de la vulnerabilidad, del riesgo de exclusión social, de la marginación, del dolor, del sufrimiento humano, en definitiva, no es posible efectuar una lista cerrada».
Puesto que «cada vez son más y por muchas razones, las personas y colectivos que, aún sin estar en ninguna estadística, en ninguna de las categorías que manejamos habitualmente podrán entenderse incluidas en tales grupos», el Justiciazgo «evolucionará en estas cuestiones tal y como los tiempos lo demanden».
Administración "de calidad"
«Con el rigor que exige, se tendrá siempre presente el principio de legalidad, recordándolo, en todo caso, a la administración y a los ciudadanos, y para hacerlo efectivo es necesario un trabajo serio que tome como referencia constante la jurisprudencia de nuestros tribunales, que atienda y traslade a la administración el punto de vista de los ciudadanos en la interpretación de las normas y también, aquellas apreciaciones que, de conformidad con la evolución social, pudieran tenerse en cuenta en la labor normativa por la que se regulan las relaciones humanas».
«No se trata sólo del control de legalidad, sino de contribuir a que la administración tenga servicios de calidad y haga realidad el principio de buena administración», ha proclamado.
Respecto a la protección del Derecho Aragonés y, en particular, del Derecho Civil propio, Gimeno ha señalado que «ya se ha superado el tiempo en que el Derecho Civil aragonés se veía como una cuestión accesoria para ocupar el lugar central que le corresponde, precisamente, al abordar las relaciones más íntimas de las personas». Ha realzado el papel del Foro de Derecho Aragonés.
Estatuto de autonomía
En cuanto a la defensa del Estatuto de Autonomía, Concepción Gimeno ha recordado que en 2022 se conmemoró el 40 aniversario de su aprobación y ha aseverado que «hablar de Estatuto es hablar de autonomía, lo que conlleva un ámbito de disponibilidad y responsabilidad». Ha expresado su deseo de continuar con la colaboración emprendida por la institución del Justicia con la Fundación Giménez Abad.
También ha abogado por «propiciar los consensos, en la medida de lo posible, sin favorecer divisiones, desde el respeto al papel de las Cortes y sus diputados».
Ha rogado a las administraciones y a los poderes públicos que sigan colaborando con la institución del Justiciazgo porque «más allá del deber jurídico, es la manera en la que lograremos una mejor satisfacción de los intereses generales».
Trayectoria profesional
Ha comentado que nació en Zaragoza, donde estudió la carrera de Derecho. Su madre era de Loarre (Huesca) y su padre de Segura de Baños (Teruel). «Hoy están conmigo, aunque ya no estén aquí. Llevo a Aragón en mis venas y en mi corazón, y pueden imaginar lo que algo como lo que hoy ocurre significa para mí».
También ha señalado que ingresó en la carrera judicial en 1993, comenzando como juez de Primera Instancia e Instrucción en Cataluña y desde 1999, como magistrada de la jurisdicción contencioso administrativa, trasladándose en 2005 al Juzgado número 4 de Zaragoza, donde ha desempeñado sus funciones hasta ahora.
«Más de 30 años de carrera profesional, de los cuales, más de 24, he servido a la jurisdicción contencioso-administrativa. Confío en que esta experiencia, esta cercanía a la actuación administrativa y sus efectos en la ciudadanía, podrá serme muy útil en mi labor como Justicia de Aragón, porque me ha permitido comprender que el Derecho Público mantiene siempre un equilibrio entre la necesidad de la administración de garantizar los intereses generales y salvaguardar los derechos de los ciudadanos».
Tras la sesión plenaria, Gimeno ha tomado posesión de su cargo en el Salón del Trono del Palacio de La Aljafería, sede del Parlamento, ante la Mesa y Junta de Portavoces de las Cortes de Aragón.