El consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul, Ramón Fernández-Pacheco, se ha referido a la sequía como un «reto mayúsculo» y ha recordado que «cuando finalice el año 2024, habremos puesto en marcha más de 1.100 actuaciones en materia de infraestructura hidráulica y movilizado hasta 2.000 millones de euros», ya que «para Andalucía el agua es como el gas para Alemania», ha recalcado.
Fernández-Pacheco ha realizado estas declaraciones en Sevilla antes de inaugurar una jornada técnica de formación sobre cambios en la normativa de prevención y calidad ambiental. El titular de Sostenibilidad de la Junta ha insistido en que «en cinco años se ha invertido en obra hidráulica mucho más de lo que se ha hecho en el resto de la democracia. Y es que el reto es mayúsculo y merece la atención de todos».
El consejero ha aludido a la subida en el nivel de los embalses andaluces, que ha calificado como «prácticamente insignificante», por lo que «en absoluto viene a solucionar este problema». De ahí que haya remarcado que «hace falta unidad de acción. Es fundamental que las administraciones no utilicemos el agua para arrojárnosla políticamente a la cara, sino para encontrar puntos de encuentro que ofrezcan soluciones a un sector productivo que lo está pasando mal y que ve peligrar su futuro. Para Andalucía el agua es como el gas para Alemania. Si no tenemos agua, nuestro crecimiento se puede ver gravemente afectado».
Es por ello que el consejero celebra que se retome el diálogo con el Gobierno central: «Hay demasiada gente que lo está pasando mal por culpa de la sequía como para que los políticos frivolicen con la misma», por lo que apela a «sentarnos en torno a una mesa en la búsqueda de soluciones constructivas». Así, «si la ministra se aviene a negociar, hablar, consensuar y preparar juntos una estrategia que nos permita ser más resistentes a los efectos de la sequía siempre, siempre contará con el respaldo de este gobierno».
La solución del traslado de agua en barcos sería «una solución excepcional que sólo se dará ante una emergencia que, de momento, no tenemos. Lo importante es que esas posibles vicisitudes nos cojan con el trabajo hecho. Por eso el despliegue de infraestructuras que Andalucía está poniendo en marcha», ha enfatizado Fernández-Pacheco.
Protestas de los agricultores
Fernández-Pacheco también ha hablado sobre las movilizaciones de los agricultores andaluces, los cuales «necesitan un marco regulatorio que sea ágil, que les permita acceder a las ayudas de la PAC con mucha más rapidez de lo que lo están haciendo en la actualidad, que la competencia sea leal con terceros países y que no compitamos con una mano atada a la espalda. Los agricultores de Andalucía necesitan precios justos», ha recalcado.
El consejero ha repetido el mensaje de Antonio Sanz: «Entendemos las movilizaciones, pero siempre pedimos que sean de manera reglada. Tienen que ser autorizadas por la administración competente, tienen que intentar causar el menos daño posible al resto de ciudadanos que comprenden y empatizan con esa reivindicación y que no tienen por qué sufrir las consecuencias de la misma», ha dicho.
También se le ha cuestionado sobre la decisión de la UE de paralizar la ley que reduce los pesticidas, afirmando que «hoy en día existe una sensibilidad ambiental que es sin duda positiva. Avanzamos hacia una ecologización de toda la actividad humana y la agricultura no puede ser ajena a ella. Los recursos naturales son finitos. Tenemos que tratarlos de manera respetuosa, sobre todo para poder legar a las generaciones venideras esos recursos que tanta prosperidad nos están dando en nuestros tiempos».
No obstante, Fernández-Pacheco ha matizado que «es cierto que la conservación de la naturaleza tiene que hacerse siempre en equilibrio con el desarrollo social y económico del territorio y, lo que es más importante, exigir a los terceros países que importan a la Unión Europea las mismas condiciones que tienen nuestros agricultores. Por eso creo que la reivindicación de los agricultores europeos en general, y españoles y andaluces en particular, es una reivindicación justa».