El expresidente de la Generalitat Quim Torra ha lamentado que el movimiento independentista ha perdido credibilidad porque vuelve a la «jaula constitucional» y a la negociación con el Estado pese a que los propios partidos independentistas habían asegurado que negociar era una vía agotada.
En una entrevista de 'VilaWeb' este domingo recogida por Europa Press, se ha alegrado de que la futura ley de amnistía beneficie a los encausados por el proceso, pero ha advertido: «Nos vuelve a situar en la Constitución Española. Como el resto de pactos que firmaron ERC y Junts. Todo ello nos hace volver a la jaula constitucional».
Ha contrastado la actitud de estos partidos con los nacionalistas vascos: cree que conservan la credibilidad porque nunca han llegado a pedir la declaración de la independencia y por eso pueden seguir pactando, «pero si uno de estos partidos llega a proponer a su gente que la vía es la autodeterminación, ya no hay vuelta atrás».
Para él, la autodeterminación «implicaba salir de la Constitución», mientras que la mesa de diálogo implica negociar una consulta de acuerdo con el artículo 92 de la Carta Magna: «Quizás resulta que los que defendemos la vía de la ruptura democrática estamos muy equivocados», ha ironizado.
«Hemos perdido mucha credibilidad. Todos los líderes políticos que estaban al frente del movimiento entre 2015 y 2017 continúan estando», ha dicho, y cree que hay que cambiar liderazgos para que el movimiento independentista vuelva a ser creíble, además de que las entidades sociales recuperen fuerza y surja alguna alternativa a los actuales partidos, si bien él rechaza liderar proyectos.
Puigdemont y junqueras
Al preguntársele si sería un error que Carles Puigdemont (Junts) y Oriol Junqueras (ERC) fueran candidatos, ha respondido: «Sería bueno que hubiera renovación de liderazgos. Y, dicho esto, no me parece lo mismo el papel que se ha hecho en el exilio que el que se ha hecho en el interior».
Sobre si eso significa que Puigdemont se presente pero Junqueras no, ha contestado que es decisión de los partidos: «No tengo nada que decir, solo faltaría. Pero creo que sería importante que todo el mundo hiciera el análisis».
«Hasta que el movimiento independentista lo lideren otra vez las opciones unilaterales, no lo conseguiremos. Todas estas mesas de diálogo fracasarán», ha augurado.
Su inhabilitación
También se ha referido a que el 31 de diciembre se agotaron los 15 meses de inhabilitación que le impuso el Juzgado Penal 6 de Barcelona en su segunda causa por desobediencia al no descolgar una pancarta de la fachada de la Generalitat en periodo electoral.
«Mi objetivo, naturalmente, es intentar conseguir inhabilitar a los jueces prevaricadores que me inhabilitaron a mí. El señor Barrientos, presidente del TSJCat», ha dicho.
Ha explicado que todavía debe confirmarse el fin de la inhabilitación que fijó la sentencia: «Se necesita que el tribunal lo reconozca. Y lo hemos pedido ahora».