El precio medio por metro cuadrado ha subido un 11,3 por ciento en la Comunitat Valenciana durante el último año, hasta los 1.776 euros, según el último índice de precios de Idealista. El precio es un 11,1% por debajo del récord alcanzado en febrero del 2006.
En València, el precio medio de la vivienda usada ha subido un 12,9%. Este incremento ha dejado el precio del metro cuadrado en 2.287 euros, aunque durante el último trimestre descendió un 0,6%.
Todos los distritos han experimentado incrementos de precios durante el último año. El mayor es el registrado en Jesús donde los vendedores piden un 18,7% más por sus viviendas. Le siguen Benicalap (17%), Patraix (15,6%), Rascanya (15%), Campanar (14,6%) y Poblats Marítims (14,3%) todos por encima del 14% de subida.
En València, los precios más altos están en L'Eixample (3.513 euros/m2), Ciutat Vella (3.255 euros/m2) y El Pla del Real (2.993 euros/m2). En la parte baja de la tabla nos encontramos con Rascanya (1.551 euros/m2), L'Olivereta (1.650 euros/m2) y Jesús (1.781 euros/m2), los distritos más económicos de la capital.
El precio de la vivienda usada en la provincia de Valencia subió un 10,4% durante el último año situándose en 1.398 euros/m2.
Alicante y castellón
En la provincia de Alicante el precio ha crecido un 11% durante los últimos doce meses. La mayor subida la experimenta Benidoleig donde los vendedores piden un 21,3% más por sus viviendas que hace un año. Le siguen las subidas de La Villajoyosa (20,3%) y Almoradí (20,1%).
En el lado contrario están las caídas de Onil y Monforte del Cid (-3,7% en ambos casos). Alicante capital experimenta una subida del 17,5% en el precio de la vivienda usada, hasta los 1.915 euros/m2.
En la provincia de Castellón el precio subió un 9% en los últimos doce meses, hasta los 1.221 euros/m2. De entre los mercados de la provincia que crecieron, Torre de la Sal tiene la subida más acusada con un 29,3% de subida. La mayor caída se ha producido en Vall d'Alba (-8,6%) seguida de la de Alcora (-4,5%). En la capital los precios subieron un 7,4% durante el último año hasta situarse en 1.277 euros/m2.
Datos de españa
El precio de la vivienda usada en España marca una subida del 8,1% durante los últimos 12 meses, tras subir un 4,4% el año anterior. Esta subida deja el metro cuadrado en 2.042 euros. Atendiendo a la variación trimestral, los precios se han incremento un 1,7% desde verano.
Todas las CCAA tienen precios más elevados que hace un año. De entre las provincias, por el contrario, fueron cuatro las que cerraron el año en negativo. En las capitales la tónica ha sido claramente alcista, ya que ninguna ha rebajado sus precios en los últimos 12 meses.
En la ciudad de Barcelona los precios se han encarecido un 2,6% durante este año, lo que ha dejado el precio por metro cuadrado en 4.167 euros. En Madrid las expectativas de los vendedores crecieron un 6,1%, lo que sitúa el precio del metro cuadrado en la capital en 4.118 euros.
Soria encabeza las subidas de precios, tras incrementarse un 23,1% en el último año. Le siguen Santa Cruz de Tenerife (20,9%) y Huesca (18,5%). Entre los grandes mercados destacan los ascensos de Alicante (17,5%), Málaga (14,1%), València (12,9%) y Palma (12%).
Más suaves han sido las subidas de Madrid (6,1%), San Sebastián (4,6%), Sevilla (4,2%), Barcelona (2,6%) o Bilbao (2,3%). Las menores subidas se han producido en Zamora (0,1%), Tarragona (1,4%), Vitoria (1,8%) y Córdoba (1,8%).
San Sebastián es la capital española más cara (5.365 euros/m2), seguida de Barcelona (4.167 euros/m2), Madrid (4.118 euros/m2), Palma (3.877 euros/m2) y Bilbao (3.241 euros/m2). En la parte opuesta de la tabla encontramos a Zamora, la capital más económica, con un precio de 1.118 euros/m2.
Según el portavoz de Idealista, Francisco Iñareta, «la alta demanda que, a pesar de la subida de tipos, se ha mantenido fuerte». «El número creciente de hogares y una oferta (sobre todo en obra nueva) claramente insuficiente han sido los factores que han provocado que el precio de la vivienda usada en 2023 no haya dejado de crecer. La subida ha sido especialmente marcada en los archipiélagos y la costa mediterránea, posiblemente apoyada por una demanda internacional de alto poder adquisitivo», ha expuesto.
Iñareta ha añadido que «ahora mismo» no hay «indicios» de un cambio de tendencia para el próximo año. De hecho, ha apuntado que, en los mercados más dinámicos, «es posible que se reactive parte de la demanda que ha permanecido todo el año a la espera de unas bajadas de precio que no se han producido y que puede decidir comprar en 2024, lo que tensionará aún más el mercado».