La Generalitat Valenciana ha solicitado al Ministerio de Educación «un pilotaje» para ver cuáles serían los efectos de ejecutar las sentencias de dos juzgados valencianos que ordenan publicar todas las plazas disponibles en el Concurso de Traslados.
Así lo ha revelado el conseller de Educación, José Antonio Rovira, después de que dos juzgados de València estimaran los recursos interpuestos por el sindicato CCOO para que las 7.555 plazas que se ofertaban en el concurso de méritos para la estabilización del profesorado interino fueran catalogadas y ofertadas primero al funcionariado de carrera en el concurso de traslados de Maestros y de Secundaria de 2022-23.
«Esta es otra de las herencias que nos ha dejado el gobierno del Botànic, de Compromís y el Partido Socialista, que en su momento, parece ser con los datos que estamos trabajando, sacaron solamente la mitad de las vacantes. Eso ha provocado que una sentencia judicial ha dicho que el concurso hay que volverlo a poner en marcha», ha lamentado el titular de Educación.
El responsable de política educativa del Consell ha manifestado que, tras conocer el fallo judicial, su departamento estudiando «posibles soluciones» y hablando con el Ministerio de Educación «porque habría que un poco recalcular el concurso de traslados».
Concurso nacional
En este sentido, ha apuntado que existe «un problema» y es que aquel concurso de traslados fue nacional. «Ahora, tenemos un concurso de traslados autonómico en marcha, que se está baremando; las comisiones de baremación van a terminar su trabajo, pero vamos a esperar un poco cuál es la decisión y, sobre todo, la colaboración o no que quiera prestar el Ministerio. Les hemos pedido que hagan un pilotaje, un sistema de prueba, para que se analicen cuáles serían los efectos de incluir las vacantes que no quiso incluir el Botànic», ha expuesto.
Ha abundado en que cada año se hace un concurso de traslados nacional y autonómico «y el problema es que, al ser este nacional, podría ser que un señor de Galicia, que ha obtenido plaza aquí, la perdiera, y que el señor de aquí, que se ha ido a Albacete, pueda tener algún problema».
«Al ser un concurso de traslado nacional, es un programa informático que maneja el Ministerio. Por eso le hemos pedido al Ministerio, mediante conversaciones telefónicas, que hagan un pilotaje y comprueben a ver cuáles serían los efectos de añadir estas vacantes que no entendemos por qué el Botánico no las puso en marcha», ha concluido.