El dispositivo de seguridad desplegado por el Ayuntamiento de València por la noche de Halloween cuenta con un total de 453 vallas instaladas en 24 puntos, hasta 300 de ellas solo en la plaza de Honduras. También se blindará el centro histórico de la ciudad.
Un total de 121 agentes estarán desplegados, con un refuerzo extra de 46 policías en el turno de noche, en 13 zonas de especial vigilancia. Se blindará el centro de la ciudad y la plaza de Honduras y se realizarán controles estáticos y dinámicos de documentación, alcohol y drogas. Además, habrá contenedores en la plaza de la Virgen y en el barrio del Carmen para evitar la entrada de alcohol y vidrio al centro histórico.
El objetivo, «trabajar por la seguridad y el descanso de todos los vecinos» ante la previsión de una asistencia multitudinaria. «Hemos trabajado para estar preparados y tratar de que esta noche sea festiva pero de convivencia para todos. Estamos preparados para actuar ante cualquier acto de incivismo», subraya en un comunicado el concejal de Protección Ciudadana, Jesús Carbonell, quien apela a la responsabilidad que «la ciudadanía demuestra edición tras edición de Halloween».
El operativo empezó a las ocho de la mañana de este pasado lunes con el depósito de 453 vallas a repartir en 24 emplazamientos de la ciudad. Solo en la plaza de Honduras, uno de los puntos que contará con más vigilancia, están previstas hasta 300 vallas.
En las plazas de España y de Benimaclet se ubicarán hasta 20 vallas en cada una. Además de blindar el centro con vallas, 20 contenedores de residuos sólidos urbanos y un completo dispositivo de agentes, la Policía Local mantendrá vigilancias en Russafa, Benimaclet, la plaza del Cedro, la avenida de Blasco Ibáñez, Honduras, la Marina, la plaza de España, las inmediaciones de la estación Joaquín Sorolla, la Cruz Cubierta y Tarongers. También se realizarán controles de alcohol y drogas en otros puntos de la ciudad.
Más policías entre las 22.00 y las 5.00
La mayor movilización de agentes está prevista a partir de las 22 horas y se prolongará hasta las cinco de la madrugada, aunque los controles estáticos y dinámicos se mantendrán con posterioridad a esa hora ante los desplazamientos que se puedan producir durante la madrugada. Habrá inspecciones y controles en establecimientos de ocio para comprobar aforos y medidas de seguridad.
El dispositivo, coordinado desde el Centro de Coordinación Operativa (CECOR), contempla la colaboración con la Policía Nacional ante cualquier reyerta que se pueda producir, además de la protección del patrimonio histórico ante el vandalismo contra el mobiliario urbano.