El 'president' de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, ha anunciado este lunes que ha llamado a la presidenta de la Acadèmia Valenciana de la Llengua (AVL), Verònica Cantó, para reunirse el próximo 11 de septiembre con el objetivo de abrir una nueva etapa «de sensibilidad» con el «valencianismo social y político» que considera que en los últimos años se ha sentido alejado de la entidad normativa.
Asimismo, y tras la polémica sobre el valenciano y el uso de las normas de la AVL que se ha vivido en las últimas semanas, Mazón ha asegurado que todo el Consell reconoce la «autoridad académica y científica» de este órgano estatutario, pero le ha pedido «gestos» de «más sensibilidad», ya que cree que hay espacio de mejora, y «de integración» que vayan «más allá de lo científico». A su juicio, esto no está «reñido» con «la autoridad académica» pero sostiene que «no podemos permitir que haya valencianos que no se sientan avalados y protegidos por la propia AVL».
Así lo ha indicado en Gandia (Valencia), en declaraciones a los medios, tras mantener una reunión con el alcalde de la localidad, José Manuel Prieto, en su primera comparecencia pública tras la polémica por la inclusión del valenciano entre las lenguas cooficiales del Congreso, el uso del no normativo en comunicaciones de la Conselleria de Agricultura en manos de Vox, o las declaraciones del conseller de Educación, José Antonio Rovira, quien manifestó recientemente que la AVL no tiene la «verdad absoluta». La presidenta de Les Corts, Llanos Massó, ha reivindicado este fin de semana las Normas del Puig frente a las de la AVL.
Mazón ha sostenido que, como presidente de la Generalitat, «en la Comunitat Valenciana 'es parla valencià'» y ha afirmado que no tolerará que «desde dentro o fuera de la Comunitat Valenciana se diga que hablamos algo distinto de lo que dicen nuestro Estatut». «'Ací es parla valencià' y es la denominación que tiene», ha reiterado y ha dicho desconocer «ese interés en llamarle de otra manera distinta de lo que dice el Estatut: no lo puedo entender, no lo pienso tolerar y no lo voy a consentir», ha advertido.
En esta línea, ha subrayado que se ha comprometido a que, independientemente de lo que hable cada uno, de que una persona hable más a menudo valenciano o no o lo hable de una manera u otra, «se acaban los tiempos en los que el Gobierno de la Generalitat le decía a cada valenciano si era de primera o de segunda».
«El Gobierno del cambio no va a tolerar que, desde un gob de la Generalitat, parezca que haya valencianos de primera o de segunda», ha insistido y ha recalcado que «no se es menos valenciano por no hablar valenciano en la Comunitat ni por hablar el valenciano que se habla en una zona u en otra».
«Todos somos valencianos de primerísima división y tenemos plena capacidad para defender nuestra denominación, nuestro Estatut y señas de identidad, que son las nuestras y no son las que otros quieren que tengamos», ha proclamado y se ha negado a «consentir» el «dislate» de «decir que un señor de Orihuela es menos que uno de Alzira». «Por ahí no voy a pasar», ha avisado y ha cargado contra el expresidente de la Generalitat Ximo Puig por decir "que quien no habla habitualmente valenciano no está capacitado para defenderlo.
"absoluto respeto"
Mazón ha expresado su «absoluto respeto a la AVL» que, según ha dicho, «todo el mundo reconocemos su autoridad académica y científica, faltaría más», pero ha considerado que «en los últimos años ha hecho falta gestos de integración y sensibilidad» porque «el valencianismo social y político se ha sentido demasiado alejado de la Acadèmia».
«Y le pido que tenga esa sensibilidad», ha dicho, en la reunión en la que ha convocado, al tiempo que ha lamentado que ha visto «muchos ruidos y demasiada intransigencia con las opiniones de los demás» cuando las administraciones «tenemos que ser sensibles con los que estamos de acuerdo y con los que pueden no estar». «Ahí está la concordia y el entendimiento», ha planteado y por eso ha justificado la necesidad de una «una nueva etapa de sensibilidad y concordia que tiene que tener la AVL y tenemos que tener todos».
En todo caso, ha insistido en que «todo el Consell reconoce la autoridad científica y académica de la AVL» y que usa en sus comunicaciones sus normas, pero subraya que es «compatible» con provocar el debate que propone. «Son compatibles las dos cosas desde el diálogo» y se ha negado a «jugar a eso» cuando «algunos quieren malinterpretar», en relación a las declaraciones de Rovira.
Declaración institucional
En cuanto a la declaración institucional que tiene previsto aprobar el Consell en pleno en defensa del valenciano, ha insistido en que en la Comunitat «no se habla más que valenciano; se denomina valenciano y viene en el Estatut, y querer jugar a señas de identidad de otros, a Països Catalans y a interpretaciones que no tienen que ver con nuestras señas de identidad, no van a tener mi respaldo», ha advertido.
En esta línea, ha apuntado que cuando la presidenta del Congreso, Francina Armengol; el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez o Ximo Puig «no introducen en el Congreso el valenciano como lengua cooficial más, se están equivocando o cuando dicen que se llama otra cosa, eso no ayuda a respetar todas las sensibilidades».
Por otro, ha recalcado que la declaración institucional será «de respeto al valenciano, a la AVL, a las normas y a lo científico y es perfectamente compatible con tener sensibilidad con todos los valencianos» porque «si solo defendemos a los que piensan como nosotros, no gobernamos para todos»".