El Centro de Innovación en Bioeconomía Rural de Teruel, sede del Centro de Investigación y Tecnología Agroalimentaria de Aragón (CITA) --adscrito al Gobierno de Aragón-- ha impulsado 'Red AgriFoodTe' en la provincia de Teruel, un proyecto de tres años de duración que surge de la necesidad de acelerar la innovación en el sector agroalimentario para favorecer la transición ecológica, digital y hacia una bioeconomía circular, exigida por las políticas europeas en la región turolense.
Para lograrlo, 'Red AgriFoodTe' ha agrupado a diferentes actores --investigadores, agentes privados, administración pública y usuario final-- para que entre ellos se forme una red de conocimiento con un enfoque multiactor en lugar de un sistema linear y reducir así la distancia entre la investigación y el sector agrario, integrándolos en un mismo mecanismo.
«En esta red estamos juntando a personas del mundo de la Investigación, agentes privados --cooperativas, empresas público/privadas del sector agroalimentario--, agentes de la Administración Pública --inspectores de sanidad, personal que se dedica a la política agraria común (PAC)--, y también se involucra al usuario final, al consumidor», ha explicado uno de los técnicos investigadores del proyecto, Acher Monllor Mendívil.
Estas personas se encuentran y comparten ideas en una de las distintas jornadas previstas en 'Red AgriFoodTe'. En definitiva, se crea una red de colaboración e intercambio de información entre agentes del sector agroalimentario en Teruel para después fomentar el intercambio de conocimientos y resultados de proyectos similares en vistas a facilitar la digitalización, transición y ecología hacia una bioeconomía circular en la provincia de Teruel.
A juicio del técnico, este tipo de proyectos en un mundo «cambiante y globalizado» son de «vital importancia» porque nos permiten «correr todas juntas sin dejar a nadie atrás». Acher Monllor es consciente que en este reto del cambio climático, las nuevas tendencias y modelos de mercado suponen desafíos «muy grandes», «pero a través de una visión holística y la inteligencia colectiva se pueden superar».
Marta Barba es la coordinadora del proyecto y también la coordinadora del Centro de Innovación en Bioeconomía Rural de Teruel, que es la sede del CITA en la provincia de Teruel. La iniciativa está financiada por el Gobierno de Aragón, a través del Fondo de Inversiones de Teruel (FITE), con participación del Ministerio de Política Territorial del Gobierno de España.
Proyecto
La jornada inicial tuvo lugar el 24 de enero con una llamada colectiva a través de diferentes medios de comunicación con el objetivo de reunir a los distintos agentes para definir la red con herramientas de co-creación, es decir, un proceso sistémico conjunto, colaborativo, concurrente y entre iguales para producir valor y nuevas ideas.
Una vez que estuvo la red definida se empezaron a detectar los principales problemas de cada agente en su sección, así como sus causas, y se valoraron una serie de áreas estratégicas que estaban definidas previamente. El agente social puntuaba si una acción la consideraba factible o no, su interés sobre ella, y a partir de ahí, se diseñó un mapa con el interés global. Además, se pudo ver cómo está actualmente el sector agroalimentario turolense.
Con la valoración de estas áreas y una imagen global, se pretendió hacer living labs --grupos de trabajo abierto que involucra a diferentes actores en un ecosistema abierto de innovación, iterativo y centrado en los usuarios para trabajar sobre una las áreas estratégicas mejor valoradas--.
Estos living labs cubrirán las siguiente temáticas: Consumo responsable y fomento de los canales cortos de comercialización; Gestión sostenible del suelo; y Revalorización de biomasa y subproductos residuos.
«El objetivo es seguir organizando eventos con charlas y luego sesiones de co-creación para trabajar en soluciones potenciales para los problemas del sector agroalimentario y forestal de la provincia», ha concluido el técnico de proyectos.