El Gobierno de Zaragoza, del PP, ha respondido a VOX que la colocación de la pancarta LGTBI «es legal», tal y como estimó el Tribunal Superior de Justicia de Aragón, en junio de 2022, que estableció que colocar una pancarta en el balcón «no vulnera el principio de neutralidad ideológica» y ésta lleve los colores del movimiento LGTBI «no vulnera, tampoco, la Ley de Banderas».
El actual equipo de gobierno defiende a Zaragoza como «una ciudad diversa que respeta las libertades individuales», ha manifestado la alcaldesa, Natalia Chueca, tras colocar la pancarta: «Yo gobierno para todos y en Zaragoza el colectivo LGBTI tiene que tener también su representación en su ayuntamiento y en su alcaldesa».
Desde el Gobierno de Zaragoza han asegurado que no se contempla su retirada en respuesta a la carta que el portavoz del grupo municipal de VOX, Julio Calvo, ha trasladado a la alcaldesa.
En dicha misiva, le pide cumplir la doctrina del Tribunal Supremo dictada en la Sentencia 1163/2020, en la que se recoge que no resulta compatible con el marco constitucional y legal vigente, y en particular, con el deber de objetividad y neutralidad de las Administraciones públicas la utilización, incluso ocasional, de banderas no oficiales en el exterior de los edificios y espacios públicos.
Además, VOX le insta a no utilizar dicha simbología en el espacio público de titularidad municipal y de uso común en cualquiera de sus formatos --pancartas, pintura o luces-- en aras a los principios de objetividad y neutralidad institucional y que únicamente sean utilizados aquellos símbolos oficiales que representan a la totalidad de la ciudadanía.
Aunque el Ayuntamiento ha decidido sustituir la bandera LGTBI por una pancarta, esa simbología constituye una reivindicación «excluyente y colectivista, y dicha exhibición supone una privatización del espacio público de uso común», ha incidido VOX.