El portavoz parlamentario de Adelante Andalucía, José Ignacio García, ha señalado este viernes que en su programa a las elecciones a las Cortes Generales de 23 de julio, a la que concurren en exclusiva por la circunscripción de Cádiz, incluirán que la prueba de evaluación del acceso a la universidad la realicen solo los alumnos procedentes de centros privados al considerar que los estudiantes de los centros públicos afrontan una evaluación diaria de sus profesores, que son empleados públicos.
En una atención a medios en Sevilla, García ha argumentado sobre la propuesta electoral de Adelante Andalucía, al calor de que el jueves se hayan conocido las notas de corte para acceder a las universidades públicas andaluzas, que «han salido informes independientes de la universidad que señalan cómo los alumnos que proceden de bachilleratos privados van dopados a la universidad».
Esa afirmación la ha sustentado en el dato de que «casi un 30% de alumnos de los bachilleratos privados obtienen sobresaliente como media de bachillerato», para precisar que cuando se trata de afrontar la selectividad «las diferencias con la pública no son apenas significativas», para concluir en consecuencia que «los bachilleratos privados están inflando las notas de los alumnos», mientras ha recordado que la nota del Bachillerato representa un 60% de la nota final.
García ha blandido que esa nota del Bachillerato privado «supone un privilegio para aquellos alumnos que han podido pagar un bachillerato privado, que no es accesible para la mayoría de la población» y ante ese escenario ha esgrimido que «planteamos una propuesta a nivel estatal, que vamos a llevar a nuestro programa electoral para las elecciones generales, para que la selectividad se realice solo y exclusivamente por los alumnos que vienen del bachillerato privado».
La exención de los alumnos de centros públicos la justifica con el hecho de que afrontan «una evaluación continua diaria durante el bachillerato llevada a cabo por profesionales funcionarios de la propia Administración», una circunstancia que no se cumple en «quienes han hecho el bachillerato en una empresa privada o en una entidad privada de algún tipo, que no han tenido ninguna evaluación por parte de la Administración», de ahí que «es lógico que tengan una acreditación por parte de la Administración que se llama selectividad».
Reforma de la ley de educación
El portavoz parlamentario de Adelante Andalucía se ha mostrado partidario de reformar la Ley Orgánica de Educación para la inclusión de esa propuesta, de manera que los alumnos de centros privados harían la selectividad y que «la nota de corte de los alumnos que vienen del bachillerato público sea la nota media durante el bachillerato».
«Nos parece que esto elimina privilegios», ha sostenido García, quien ha insistido en el hecho de que los alumnos de centros públicos «no tienen por qué someterse a una segunda evaluación desde lo público», una iniciativa que llevaran a su programa electoral «porque creemos que así vamos a eliminar ese sesgo que existe de clase entre el que puede pagar un bachillerato privado, en el que te inflan las notas, y el que no puede pagarlo y está en la pública».
José Ignacio García ha apelado a la repercusión que tiene la nota del Bachillerato en la selección posterior de los estudios universitarios, agravada por «la enorme competitividad» que deben afrontar los jóvenes andaluces y de toda España «para entrar en las carreras, unas notas altísimas de corte, muy pocas plazas», con el agravante de que quienes «pueden pagarlo tienen el recurso de irse a la universidad privada pagando varios miles de euros al año y que casualmente no tiene nota de corte, siempre es un cinco».