La Junta General de Regants dels Canals d'Urgell (Lleida) ha acordado cerrar el próximo martes el riego a 70.000 hectáreas agrícolas en el Pla de Lleida por la sequía, según ha explicado fuentes de la entidad a Europa Press este jueves.
Está previsto que la eliminación del riego provoque pérdidas en los cereales de invierno y del 100% de los árboles fruteros.
La semana pasada, la Comunidad de Regantes ya decidió reducir la dotación de riego de 27 a 23 metros cúbicos por segundo, con el fin de garantizar los cultivos de cebada y trigo.
"La falta de lluvias y la consecuente reserva bajo mínimos de los pantanos de Oliana y Rialp han obligado a los regantes a tomar esta drástica medida solo un mes después de abrir el canal", han explicado la entidad en un comunicado.
Sólo se garantizará el agua para los abastecimientos y la supervivencia de los árboles, y el director general de la Comunidad, Xavier Díaz, ha insistido en la necesidad de no sembrar cosechas de verano, ya que la situación podría acabar en "pérdidas millonarias".
El presidente de la entidad, Amadeu Ros, ha recordado que la próxima semana se celebra una reunión de la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE), que debe debatir la solicitud de estado de excepcionalidad, lo que permitiría "poner en marcha el mecanismo necesario para pedir las compensaciones económicas permanentes".
Han pedido a los ayuntamientos de la zona que sean responsables en la gestión de las reservas de agua, ya que con "el canal principal cerrado se deberá asegurar el abastecimiento de la población en primer término".