El ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, ha sostenido que España «ha salido por la puerta grande» de la crisis con Marruecos, tras el giro del Gobierno en su posición respecto al Sáhara al apoyar el plan de autonomía marroquí sobre este territorio.
«Hemos superado una crisis profunda y hemos establecido las bases para que no se repita», ha asegurado Albares en una entrevista del diario 'Ara' recogida por Europa Press, y ha añadido que España y Marruecos han sentado nuevas bases de respeto y beneficio mutuo.
Así, ha destacado que las relaciones comerciales entre ambos países están en máximos históricos, con 20.000 millones de euros de comercio bilateral y 12.000 millones en exportaciones: «Solo los EE.UU. y Reino Unido son un cliente mejor nuestro fuera de la Unión Europea».
También ha resaltado el plan de inversiones marroquí en empresas españolas por valor de 45.000 millones de euros y la lucha conjunta contra mafias de tráfico de personas y el terrorismo yihadista, con seis redes desarticuladas en los últimos meses «gracias al trabajo conjunto de las fuerzas policiales».
Albares ha detallado que existe un calendario acordado para culminar la reapertura de las aduanas comerciales con Marruecos: «No se hace público porque no queremos avalanchas, no queremos que se repitan imágenes del pasado, de comercio atípico».
Argelia
El ministro ha defendido tener «las mejoras relaciones con esos países con los que se comparte una frontera común», algo que cree que se aplica a Argelia además de a Marruecos.
«Con Argelia queremos exactamente lo mismo que con todos nuestros vecinos: una relación que se base en la amistad, el respeto y beneficio mutuo, en la no ingerencia en asuntos internos», ha asegurado.
Ha mantenido que «desde el primer minuto» España ha tendido la mano a Argelia, a la que reconocen su papel como suministrador de gas fiable, en sus palabras; sin embargo, eso no impide que España defienda sus empresas y sus intereses, ha puntualizado.
Guerra en ucrania
Sobre el conflicto en Ucrania, ha afirmado que es «la guerra de un solo país» y del presidente de Rusia, Vladimir Putin, y que ni España ni la Unión Europea forman parte de ella aunque defiendan el respeto a la Carta de la ONY y a la soberanía de Ucrania.
Preguntado por si eso supone que Ucrania debería recuperar Crimea, ahora bajo dominio ruso, Albares ha replicado que implica que recupere «todo el territorio dentro de sus fronteras legalmente reconocidas a escala internacional».
Ante la Cumbre Iberoamericana en Santo Domingo, ha asegurado que España no dice «a los otros gobiernos lo que tienen que hacer» sobre la guerra en Ucrania, después de que la mayoría de países de América Latina hayan optado por no exportar armamento --España sí lo ha enviado--.
«Pero sí que hablamos de defensa de la legalidad internacional», ha añadido Albares, que adelantó este jueves que España ha realizado varias propuestas sobre la guerra en la declaración final de la Cumbre Iberoamericana, que arranca este viernes en Santo Domingo.
En cuanto a Venezuela, el ministro ha asegurado que ve el proceso político en marcha en el país con esperanza y que el Gobierno da apoyo al diálogo entre venezolanos, y ha apostado por «llegar a un acuerdo político» tras el acuerdo para afrontar la crisis humanitaria con la oposición.