La consejera de Fomento, Articulación del Territorio y Vivienda, Marifrán Carazo, ha participado junto el alcalde de Almuñécar, Juan José Ruiz Joya, en la mesa de trabajo creada por la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento para la tramitación del nuevo PGOU de esta ciudad de la costa de Granada.
En una nota de prensa, la consejera ha puesto de relieve que «este espacio de diálogo y consultas» abierto con las mesas de trabajo «ha sido determinante no sólo para la reciente aprobación provisional del nuevo planeamiento, sino para tener una base sólida para poder alcanzar el visto bueno definitivo al nuevo PGOU en poco tiempo».
La titular andaluza de Fomento ha resaltado las «numerosas trabas» que ha sufrido un planeamiento que acumula 36 años de vigencia «plagado de modificaciones que, al final, han terminado de desvirtuar el documento».
Como contrapunto, Marifrán Carazo ha destacado que el nuevo planeamiento sigue «el camino de la seguridad jurídica», gracias a que «se ha elaborado desde la base del diálogo y la estrecha colaboración, resolviendo todas las dudas que pudieran tener desde el equipo de redacción del PGOU». Esta solidez del documento «se ha fraguado no sólo en el marco de las mesas de trabajo celebradas desde 2021, sino también a las numerosas llamadas, correos electrónicos y mensajes que se han atendido durante este proceso de tramitación».
La mesa de trabajo celebrada este lunes ha dibujado la hoja de ruta posterior a la aprobación provisional del PGOU por parte del Pleno del Ayuntamiento, que se produjo el pasado viernes 10 de marzo. El camino hacia la aprobación definitiva pasa, en primer lugar, por la solicitud de informes sectoriales a través de la Comisión Provincial de Coordinación Urbanística, que en el plazo de un mes evacuará los informes sectoriales de verificación autonómicos.
Por su parte, el Ayuntamiento solicitará los informes sectoriales de verificación de competencia estatal, y solicitará la Declaración Ambiental Estratégica. Una vez recabados estos informes y la Declaración Ambiental Estratégica, el último paso será entregar el PGOU a la Delegación Territorial de Fomento para su aprobación por la Comisión Territorial de Ordenación Urbanística. «Un proceso que, aunque tiene varias etapas, se va a ver reducido sustancialmente con la tutela de la Junta de Andalucía», ha precisado la consejera de Fomento, Marifrán Carazo.
Las mesas de trabajo son una herramienta que la Junta de Andalucía ha puesto desde la pasada legislatura a disposición de los ayuntamientos que se hayan marcado como objetivo agilizar la tramitación de sus planes generales.
En el caso de Almuñécar, esta mesa de trabajo se constituyó el 13 de marzo de 2021 a través de la Instrucción 2/2020 de la Dirección General de Ordenación del Territorio y Urbanismo, y ya se han celebrado tres sesiones, donde los técnicos de la Delegación Territorial de Fomento de la Junta han asesorado al Ayuntamiento y al equipo redactor del nuevo plan sobre los pasos para su aprobación. De hecho, en esta última sesión se han aclarado todos las dudas sobre la tramitación posterior a la aprobación provisional del Pleno municipal.
Almuñécar es uno de los ocho municipios granadinos que se han acogido a la fórmula de las mesas de trabajo. Además del Ayuntamiento sexitano, se han constituid mesas de trabajo para el nuevo planeamiento de Cájar, Cúllar Vega, Granada capital, Huétor Vega, Moraleda de Zafayona, Ogíjares y Vegas del Genil, que afecta a una población aproximada de más de 310.000 habitantes. «Las puertas de la Junta de Andalucía están abiertas de par en par al diálogo y a facilitar el camino a la aprobación de los planes generales», ha insistido la consejera de Fomento.
Aunque en el caso de Almuñécar se está tramitando el nuevo PGOU sobre la base de la antigua LOUA, el Gobierno municipal ya ha señalado a la Junta de Andalucía "que se está trabajando ya en adaptar este plan a lo que marcha la nueva Ley de Impulso para la Sostenibilidad del Territorio de Andalucía.