El Real Mallorca empata a cero ante el Athletic de Bilbao en un partido donde los de Aguirre volvieron a exhibir una función plana, previsible y de difícil digestión. El plan del mexicano sigue siendo el mismo: correr tras el balón y esperar algún fogonzazo para matar en una contra o una jugada de estrategia, pero poca cosa más. Heyden fue titular en el eje junto a Valjent y Gio y en muchos conceptos, tanto atrás como adelante, este equipo necesita mejorar urgentemente.
En la primera parte el Mallorca fue de más a menos. Arrancó con intensidad el encuentro, quiso ser protagonista del juego en campo contrario e intentó inquietar la meta rival. Pero casi todo se quedó en eso, en un tratado de intenciones que no terminó de cristalizar. Al esta propuesta le falta algo de sal y pimienta. Durante el primer tiempo le faltó asustar, encender la luz en las inmediaciones de Unai Simon.
Las mejores oportunidades fueron para el Athletic que hasta en tres ocasiones, dos de ellas merced a disparos de Sancet y otra a tiro de Nico Williams, puso en serios aprietos la portaría de Rajkovic. El Mallorca poco a poco se fue apagando mientras que el Ahtletic inclinaba el campo a su favor. Nadie en el once rojillo era decisivo. Sergi está excesivamente volcado a la izquierda y su potencial disminuye y a partir de ahí solo cuenta una cosa en este escenario: balones a Muriqi o en su caso a Larin, que tampoco está para según qué trotes. Y a esperar a ver si la moneda sale cara.
El curso pasado salió de diez, pero por el momento Aguirre no da con la tecla. Dani va y viene, roba y entrega, pero no conduce hasta el área y los intentos de Lato y Maffeo por bandas no cristalizan. A todo esto, la defensa duda y la primera parte en conjunto dejó un poso de incertidumbre dejando todo a la espera para de que pudiera cambiar en el segundo tiempo. El Athletic, con lo justo, podía haber cerrado el primer acto con una ventaja de cero goles a tres.
Tras la reanudación el Mallorca intentó agitar el partido con más protagonismo en la zona de peligro rival y el aviso llegó en forma de gol anulado a Muriqi. Darder lanzó un balón de falta medido al delantero, que salió en fuera de juego y su tanto no subió en el marcador. Pero la continuidad en el juego es el gran hándicap de este Mallorca, que una vez más fue excesivamente intermitente.
Valverde intentó agitar también el choque con la presencia de Muniain en el campo, lo que obligó hasta a dos intervenciones de Rajkovic. Un pisotón a Muriqi, susceptible de ser un penalti moderno tampoco fue señalado y el partido entró excesivamente pronto en ese ir y venir de campo a campo. El once de Aguirre se mostró falto de ideas, excesivamente espeso y para nada efectivo. Un punto entre el sopor. Ha sumado dos de doce posibles. Sigue en descenso. Toca hacer un reset y volver con más chispa dentro de quince días.
Ficha técnica
0 - Real Mallorca: Rajkovic; Maffeo, Giovanni González, Van der Heyden, Valjent, Lato (Jaume Costa, min. 68); Samu Costa, Darder (Abdón Prats, min. 83), Dani Rodríguez (Morlanes, min. 68); Larin (Javi Llabrés, min. 55) y Muriqi.
0 - Athletic Club: Unai Simón; Lekue (Prados, min. 59), Vivian, Paredez, Yuri; Galarreta, Vesga (Dani García, min. 78); Iñaki Williams (Raúl García, min. 82), Sancet (Iker Muniain, min. 59), Nico Williams (Berenguer, min. 78); Guruzeta.
Árbitro: Figueroa Vázquez (Comité Andaluz). Enseñó tarjeta amarilla a Lekue (min. 44).
Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de la LaLiga EA Sports disputado en el estadio Son Moix ante 17.043 espectadores. El exfutbolista y exdelegado del Mallorca Damián Amer recibió un homenaje en el que participaron el presidente y el consejero de Negocios del club balear, Andy Kohlberg y Alfonso Díaz.