El Ajuntament de Palma, a través de la gerencia de Urbanismo, ha denegado la licencia de obras al RCD Mallorca para que construya una residencia de jugadores en la ciudad deportiva de Son Bibiloni. Como se recordará, el club presentó hace un par de años un proyecto para construir una residencia con capacidad para 20 jugadores en el lugar donde, actualmente, se ubica la nave que custodia la maquinaria de jardinería. El proyecto era una apuesta personal del ex CEO, Maheta Molango, y tenía un presupuesto de medio millón de euros.
En principio la nueva residencia contaba con el visto bueno del Ajuntament de Palma pero, al estar proyectada sobre terreno rústico y Son Bibiloni calificado como de uso deportivo, la única forma de autorizar la obra era que el Consell Insular determinara que el proyecto era de interés general.
Cort emitió un informe favorable que se unió a la petición que el club presentó al Consell, pero ahora el organismo insular ha denegado el interés general de la residencia, por la cercanía de un torrente y motivos de seguridad, entre otros, y Urbanismo se ha quedado sin mecanismos para aprobar la licencia, por lo que se le deniega.